El encuentro frente al Athletic de este miércoles en San Mamés ha dejado varias jugadas polémicas. Estas han sido claves en el desenlace del partido, nuevamente perjudicial para el Levante, en el tiempo de descuento. Estas son las acciones discutidas:

En la primera parte, con 2-0 en el marcador, Coke remató en boca de gol un córner botado por Campaña después de que Iago Herrerín no blocara con precisión el esférico, situación que aprovechó el madrileño para empujar al fondo de la red mientras el cuero estaba en el aire. Munuera Montero dio gol inicialmente pero lo ha anulado el asistente, por considerar que el contacto de la mano del madrileño con la mano de Herrerín evitó a este blocar el balón.

A pocos segundos del final de la primera parte, Jason puso un centro en el lateral del área que impactó en el brazo de Íñigo Martínez. El defensor no lo tenía pegado al cuerpo pese a que había poca distancia entre ambos futbolistas. Según el reglamento, esto último provocó que la acción no sea punible.

La segunda mitad empezó de la mejor manera para el equipo granota. Roger cayó derribado tras llevarse un balón dividido entre dos defensores y, al impactar en uno de ellos, Iñigo Martínez, supuso la pena máxima para poner el primero para los suyos. La plantilla bilbaína protesto con efusividad la acción al considerar que el contacto no era suficiente como para señalar la infracción.

Con el tanto de Cabaco parecía que el conjunto levantinista se iba a llevar un punto ante el Valencia, pero Munuera Montero pitó un penalti riguroso que tumbó todo el esfuerzo realizado para empatar el choque. Moses Simon, en un intento de despejar el balón, lo sacó con la punta de la bota y acabó el movimiento pisando a un futbolista local. El nigeriano tocó primero el esférico y su pisada posterior fue desintencionada. En el origen de la jugada, De Marcos aparecía ligeramente avanzado y, por tanto, en fuera de juego.