Paco López ha sido, además a su pesar, el protagonista del vuelo de ida a Bilbao de este miércoles por una anécdota que no ha pasado de un pequeño sobresalto de viaje. Y es que el Levante UD, aunque ha llegado a la hora prevista, ha despegado con el tiempo en los talones por un descuido del míster, que ha sido el último en subirse al avión.

El míster se ha dado cuenta de camino a Manises de que se había dejado la cartera con toda la documentación en el coche. Para no correr riesgos en el control del aeropuerto, pensando sobre todo en la vuelta, que será después del partido ante el Athletic Club en San Mamés, se ha activado un improvisado protocolo de emergencia para ir a por ella.

Ha sido Tito, de hecho, quien ha acudido al rescate como chófer del míster con su vehículo particular para recogerla en el aparcamiento del Ciutat. Pese a todo, el equipo ha salido y llegado al hotel de concentración sobre el horario previsto. Entrenador y director deportivo, eso sí, han sido los últimos en subirse.