Aunque a estas alturas de mercado los ojos se van detrás de las entradas, el Levante UD tiene el resto de los sentidos puestos en las salidas. Aligerar la plantilla y cumplir así el deseo del entrenador es el primer gran reto al que se enfrenta la nueva área deportiva. Con Quico y Paco, quienes hasta ahora llevaban el volante, fuera de circulación durante unos días de descanso, Manolo Salvador y David Navarro van a tener que apretar el acelerador.

«Todavía nos quedan por hacer 15 operaciones y a lo mejor me quedo corto», avisó el presidente en la presentación de ambos el jueves refiriéndose tanto a los refuerzos que quedan como sobre todo a los descartes. Y es que, con más de 30 jugadores con contrato en vigor, el overbooking está asegurado el próximo 8 de julio cuando arranque la pretemporada. Una situación que el míster, con las ideas claras desde que acabó el curso, quiere evitar a toda costa por la experiencia de hace un año. Sin embargo, sencillo no es.

Aunque los de Luna y Sadiku ya han pasado por el Ciutat, los próximos van a ser días de peregrinaje para los agentes de futbolistas con el cartel de prescindibles. Aunque por distintas razones, hasta 15 jugadores tienen ahora mismo su futuro en el aire. Desde los canteranos que por contrato forman parte del primer equipo a los que vuelven de sus cesiones sin haberse ganado un sitio pasando por los que no entran en los planes de Paco después de una temporada con pocos minutos. A ellos hay que añadir a Campaña debido a la posibilidad, con el Sevilla como mejor colocado, de ejecutar su renoventa. Y a Oier, que podría buscar minutos en otra portería tras haberse quedado taponado.

El primero en dejar sitio

Más allá de Pedro y Jason, el único que de momento ha hecho hueco es Rubén, traspasado por tres millones más medio extra a Osasuna. El resto están en el mercado y de salida la idea es hacer caja con ellos, lo que asegura el tira y afloja. Pese a no entrar en los planes de Paco, por jugadores como Saveljich, Prcic o Sadiku, entre otros, el objetivo es rascar beneficio o cederlos, si bien existen fórmulas intermedias como los traspasos encubiertos a coste cero. A Orriols han llegado hasta ahora propuestas difusas, pero pocas concretas. Del acierto en esta operación salida va a depender en buena medida la suerte del proyecto, en especial a la hora de cuadrar los números del fair-play desembarazándose de fichas superfluas y tratando de hacer caja para cuadrar las cuentas.

Mientras que el Almería ha demostrado interés en Saveljich, para Dwamena hay un camino de vuelta a Suiza, igual que para Sadiku tras su medio año en el Lugano. Entre los casos más complicados de gestionar está el de Ivi, cuya cesión el Valladolid canceló a mitad de temporada para mandarlo al Sporting. Casos peculiares son también los de Moses Simon, que podría salvar el corte por la falta ahora mismo de extremos, o el de Chema Rodríguez, el central que menos minutos ha tenido con Paco y cuya estancia en el Levante tiene fecha de caducidad.