No importa que se vuelva a apostar por Borja Mayoral o que la llegada de Sergio León aporte un plus de verticalidad en la punta de lanza. Roger Martí continúa demostrando que el delantero que necesita el Borja MayoralSergio LeónRoger MartíLevante UDDa igual el contexto y la circunstancia que exista. Su hambre por no dejar de anotar es tan insaciable que siempre querrá más. El pasado viernes salió desde el banquillo y en un abrir y cerrar de ojos se armó de valor para remontar el partido desde los once metros. Además, por partida doble, haciendo que las estiradas de Andrés Fernández fueran infructuosas. Sin embargo, su situación en el club no le genera comodidad. «Llevo dos partidos saliendo del banquillo y no me gusta, sobre todo después de la temporada que hice el año pasado», confesó en zona mixta después del encuentro.

El delantero de Torrent fue el máximo anotador con trece dianas en su cuenta particular, y pese a ello, no tuvo estabilidad en el once de Paco LópezSolo dispuso de 1.892 minutos, repartidos en 31 partidos en los que salió desde el banquillo en ocho de ellos. Un balance que genera la opinión, tanto a la gran mayoría de los aficionados como al propio jugador, de que su esfuerzo, sacrificio y trabajo queda en vano y desconsiderado.

No obstante, siempre mostrará agradecimiento hacia el club que apostó por él en sus inicios, pero también necesita que le reconozcan, como canterano que es, toda la dedicación que realiza diariamente para estar a la altura que se exige para competir en la máxima categoría del fútbol español. «Yo siempre he dicho que estoy muy agradecido al Levante, pero creo que estoy ganando muchas cosas y muchas veces no se me reconoce. Parece que tengo que hacer siempre el doble pero bueno, estoy muy tranquilo». Con contrato hasta 2023 y mucho cartel en el panorama futbolístico, Roger MartíPara que su olfato goleador, el que ha atesorado durante toda su trayectoria, siga brindándole alegrías al cuadro levantinista en el futuro. Siempre con la mentalidad de seguir esforzándose sin desfallecer en el intento, aunque la tarea, según los precedentes, se antoje laboriosa. No obstante, el técnico de Silla reconoció, en la rueda de prensa posterior al choque, el desempeño de Roger al salir al terreno de juego, pero sin desviar su discurso principal. Los once jugadores que alinee serán los que más se lo merezcan, pese a que el dibujo, y lo que requiera el rival, modifique su forma de ver la gestión del vestuario. «Me alegro sobre todo por los jugadores que han pasado momentos difíciles. Unos días serán uno y otros días será otro», dijo satisfecho el entrenador.

Ahora, 'El Pistolero' debe hacer oídos sordos y trabajar en silencio. Sin ruido y dejando claro que él puede ser la referencia arriba. Porque en ningún tramo de su trayectoria le han regalado nada. Incluso en ocasiones tuvo que remar a contracorriente ante las adversidades que se encontró en forma de lesión. Su potencial, clase, capacidad goleadora e instinto para oler la sangre cerca del área rival son argumentos suficientes para que sea un fijo en la alineación. A pesar de ello, mantendrá la misma mentalidad aunque su futuro sea incierto. «Estoy tranquilo, trabajando como siempre y sabiendo que tengo contrato aquí. Lo que pasará nadie lo sabe».