Han pasado casi siete años desde la última visita del Mallorca al Ciutat de València en Primera División. Aquel 9 de diciembre de 2012,el por estonces EuroLevante no solo ganó, sino que también goleó (4-0) haciendo disfrutar a un feudo granota entregado a su equipo.

El equipo de Orriols avanzaba con pié firme en LaLiga, donde transcurridas las primeras quince jornadas de LaLiga ocupaba la sexta posición con 24 puntos en su casillero, 12 por encima del descenso, y además ya había su clasificación en la Europa League certificada. Qué inicio de temporada aquel, con un combinado granota enchufado bajo las órdenes de Juan Ignacio Martínez.

El coliseo blaugrana estaba siendo un prácticamente inexpugnable. Solo el Barça de los 100 puntos (terminó con el título) y el Real Madrid lo habían asaltado, mientras otros como Atlético se habían dejado puntos y Espanyol, Real Sociedad, Valencia y Granada habían perdido.

En la jornada quince llegó el turno del cuadro bermellón, que se llevó para Palma cuatro goles. Martins, David Navarro, Rubén García e Iborra hicieron los goles en un partido en el que Roger Martí, el único superviviente actual de aquella plantilla, disputó su cuarto partido con el primer equipo saltando desde el banquillo.

Los primeros pasos de Roger

Fueron los comienzos profesionales de El Pistolero, que aquel curso compitió tanto en el filial y el primer equipo, pese a que ya había tenido minutos en LaLiga y en la Copa en la 11/12. Aquel curso llegó su primer gol en LaLiga (ante el Celta) y fue curiosamente, en aquel 4-0 frente al Mallorca cuando celebró por primera vez un triunfo en la élite, y también en el Ciutat de València. Posteriormente, el atacante marchó lejos de casa para crecer, formarse y convertirse en el futbolista que es hoy en día con dos experiencias en Segunda División (Zaragoza y Valladolid), antes de volver al Levante UD.

El delantero granota, que no está contando con los minutos que desearía, afronta con ilusión ahora este partido. En su cabeza está recuperar la titularidad y hacerlo a base de goles. El último superviviente de aquel triunfo, espera ser decisivo para poder repetir la historia. Sería una manera perfecta de volver tras el parón y de recuperar sensaciones, tras el tropezón de San Mamés ante el Athletic.

El Mallorca no se da mal

El cuadro insular, uno de los históricos de LaLiga con 28 temporadas en la élite es un rival que se le da bien al Levante. Se ha de retroceder hasta 2006 para encontrar el último triunfo oficial de los baleares ante los granotas (0-1, gol de Arango) en el Ciutat. Desde entonces, tres empates (2-2, 1-1 y 0-0 y una victoria 4-0 en LaLiga y el último triunfo, 2-1, en el último enfrentamiento en Orriols entre ambos, en 2016 en Segunda División.