El Levante tiene muy ajustados los números hasta el punto de que la situación financiera de cara al mercado invernal, pese a que hay fichas libres para poder fichar, prácticamente le imposibilita acometer un traspaso y le dificulta incluso hacerse con una cesión. El club granota apenas tiene un margen de 170.000 euros dentro de su límite salarial derivado del fair play financiero y eso, teniendo en cuenta que el salario mínimo ahora mismo de un jugador de LaLiga Santander es de 155.000 euros por temporada —en este caso podría venir un futbolista tan solo para media campaña, pero si se pretende que sea un activo de nivel es harto complejo que su salario sea tan reducido—, reduce al mínimo el margen de maniobra. Ante esa tesitura, si no hay salidas, el único escenario que se antoja como viable es una cesión, y tendría que ser muy barata, o un coste cero de nivel, alternativa casi utópica.

El control económico que puso en marcha LaLiga hace seis años es un reglamento que hoy cuenta con 110 artículos que regulan salarios fijos y variables, la seguridad social, las primas colectivas, los gastos de adquisición (incluidas comisiones para agentes) y las amortizaciones (importe de compra de los jugadores imputado anualmente en función del número de años de contrato del jugador). No hay posibilidad de burlarlo. Es por ello que si el Levante UD quiere acudir al mercado invernal con colchón económico debería antes dar salida a alguno de sus activos que le acarrean gastos (ya sea de los que están en plantilla como los cedidos), si bien contablemente siempre interesa más que se trate de jugadores que estén en la plantilla y que ya estén amortizados.

En función de eso, el límite de coste de la plantilla deportiva varía cada décima de segundo, pero el control de la patronal de clubes para evitar irregularidades es cada vez mayor hasta el punto de que si se firma ahora una cesión con una opción de compra obligatoria, LaLiga lo contabiliza ya por la cantidad de traspaso pactada. Otras maniobras como las de incluir variables en los sueldos también está vigilada y computa a través de una media de forma inmediata en las normas.

Eso es de forma inmediata y a medio plazo, antes del 30 de junio de 2020, el club está obligado a vender activos por 12 millones según reflejaron las cuentas aprobadas en la última reunión del Consejo.

De Paco a Manolo

Paco López fue cuestionado recientemente sobre si considera que el equipo debe o no ser reforzado en la ventana invernal, respondiendo que a su parecer «ahora mismo» no ve necesidad de hacerlo porque «con esta plantilla podemos llegar a conseguir los objetivos». No obstante, indicó que «luego ya sabes las cosas que pueden pasar en el fútbol de un día para otro», dejando el futuro abierto. Paralelamente, la secretaría técnica ha estado y está buscando en mercados extranjeros para estar preparada ante un cambio de escenario o buscando una bicoca que pudiese encajar ahora.