El Levante sigue con paso firme en las obras del Ciutat de València desde que el Estado reanudó la actividad dentro de los trabajos de índole inesencial. La reactivación de las mismas, que se dio hace apenas una semana, significó un alivio para la entidad, ya que su detención supuso un frenazo en seco en su intención de finalizar la primera fase de construcción en los plazos y parámetros establecidos.
La remodelación del estadio, pese a que haya sufrido un alto en el camino por cuestiones de urgencia, avanza pese a que aún no haya certeza de si se instalará la cubierta este verano. Hasta el momento, en el lugar donde se encuentra implantado el marcador, se han depositado ya dos torres de sujeción, cuya estructura está incrustada en las paredes que envuelven el campo y agarradas a las columnas que tiene de por sí. Además, se está llevando a cabo la preparación de una fachada más cercana para la colocación de más torres.
No en vano, la zona donde se encuentran las taquillas y la tienda oficial del club está padeciendo un proceso de reestructuración. Los agujeros creados para la introducción de la unión de las torres, al parecer, también se tendrán que realizar en dicho lugar. Por lo tanto, los obreros están haciendo trabajos de demolición para crear una contextura acorde al plan trazado.
Asimismo, el aspecto que muestran los pilares que se hallan en proceso de montaje vislumbra el aspecto que tendrá la cubierta. También, cuál será su altura, que a su vez supondrá un aumento del número de espectadores. Concretamente, se colocarán 1.600 asientos más.
Cabe recordar, que el lavado de cara que está sufriendo el Ciutat de València no solo tendrá la instalación de un techado que garantice comodidad al aficionado que acuda a ver los encuentros del club levantinista, cuyo proceso se dará, según la previsión, a lo largo de tres meses. También, se aprovechará para introducir un alumbrado más moderno, una sky cam que le dé modernidad a las retransmisiones deportivas del primer equipo y dos nuevos videomarcadores.
Sin embargo, y sin novedades de gran calado, la incertidumbre todavía planea sobre Orriols. La duda sobre cuándo se retomará LaLiga Santander y en qué condiciones, además de saber si el organismo dirigido por Javier Tebas aprueba la petición del Levante de jugar como visitantes, son los motivos que no solamente tienen en vilo a la entidad, sino que dificultan el hecho de tomar una firme decisión sobre la instalación de la nueva cubierta durante el verano. De momento, los obreros hacen marcha independientemente del devenir de los acontecimientos.
