Con la renovación de José Luis Morales y como principal caballo de batalla, la siguiente patata caliente que tendrá sobre la mesa el Levante en lo que a confección de plantilla se refiere es la de Rubén Rochina y cuyo rendimiento va camino de mejorar esta singular campaña respecto a los cursos anteriores en el club granota.

La idea que llevan tanto Manolo Salvador como David Navarro es la de ofrecerle al jugador de Sagunt una renovación siempre y cuando este acepte entrar en los parametros del nuevo presupuesto y la nueva realidad, si bien al club no se le escapa que quedándole un solo año de contrato y con 29 años ahora mismo, la posibilidad de buscarle una salida al futbolista que permita ingresar algo de líquido por él es ahora o difícilmente más adelante.

En el club granota, pese a todo, tienen la intención de intentar seguir contando con él ya que aunque esta temporada ha arrastrado algunos problemas físicos que sobre todo en el principio de campaña le impidieron tener continuidad, sus picos de rendimiento han sido buenos y por encima de todo se le considera un jugador comprometido.

Hasta la interrupción de la competición acumuló 19 partidos disputados con un total de 1.180 minutos jugados y cuatro goles, algunos de ellos de muy bella factura desde la larga distancia, y eso pese a que en el inicio de campaña esos problemas físicos anteriormente mencionados prácticamente le hicieron estar semana sí semana no sin entrar en las convocatorias de Paco López.

De hecho el futbolista, después de haberse asentado en el once titular, no pudo disputar tampoco por culpa de una nueva dolencia -de la que ya está recuperado- los tres últimos encuentros previos a la suspensión del campeonato y pese a ello sus números en el apartado goleador ya igualan los del pasado curso (también marcó cuatro goles, si bien entonces jugó 1.898 minutos) y superan con creces los de su primera media temporada tras llegar en el mercado invernal (un gol en cinco partidos jugados).