La remota posibilidad que el Levante aún podía mantener -si es que realmente existía- de pelear por Europa tras un empate sin goles entre dos equipos que la próxima temporada seguirán en la máxima categoría. Ha sido un partido discretito en el que el gran protagonista por parte azulgrana ha sido una vez más Aitor, quien ha detenido un penalti en el descuento para evitar la derrota.

Cuesta creerlo, pero ha dado la sensación de que la tranquilidad derivada del hecho de tener la salvación virtual ya en el bolsillo se ha convertido en falta de tensión por parte del conjunto granota. No parecía algo voluntario, pero sí que el subconsciente de los jugadores de Paco estuviese mandando mensajes continuos. Y es que digan lo que digan las matemáticas aún, todos ellos saben bien que la próxima temporada estarán en LaLiga Santander.

Así las cosas la primera parte ha sido tediosa. El Levante ha empezado buscando más la portería contraria que su rival con un disparo alto de Rubén Rochina y un balón en profundidad a Roger al que el pistolero por muy poco no ha llegado antes que Masip. Eso quizás ha hecho albergar esperanzas, pero ha sido un espejismo ya que de forma progresiva el Valladolid primero ha conseguido anestesiar el partido y después, por mediación de Óscar Plano, aproximarse a un Aitor que en el primer acto casi ha sido un espectador de lujo con sendos disparos desviados.

Sin apenas noticias se ha llegado al descanso y en la reanudación hay que admitir que Valladolid, sobre todo por mediación de Nacho por banda izquierda, sí que ha exigido ya de verdad al guardameta granota. Los de Pucela han apretado el acelerador quizás conscientes de que su oponente estaba fondeando y eso ha permitido que el exgranota Míchel haya acariciado el gol poco después en un disparo desde la frontal repelido de nuevo por Aitor.

Sintomática ha sido en esa fase una posesión inmediatamente posterior del Levante en la que Postigo primero ha ralentizado la acción sin reparos de ningún tipo y, pese a todo, el equipo de Paco López ha acabado fabricando una buena ocasión culminada con disparo alto de Hernani a pierna cambiada. Nadar y guardar la ropa.

El partido se había desperezado ya y ha sido entonces cuando Aitor ha dejado ante Ünal una primera de esas paradas que presumiblemente harán que este verano lleguen ofertas importantes por él a Orriols. El exgranota ha encarado y dejado sentado a Vezo -que dicho sea de paso ha cuajado una actuación con muy pocos lunares-, pero su chut de nuevo ha sido interceptado por el portero del Levante que, pese a estar ya vencido, ha dejado un pie muy firme para abortar la ocasión blanquivioleta.

La cita agonizaba ya, pero todavía ha habido tiempo para que a instancias del VAR el colegiado señalase un penaltito cometido por el propio Aitor tras un despeje suyo mejorable y que el propio meta, con el mismo pie que en la acción anterior, ha conseguido desviar también.

Lo dicho un partido sin historia en el que la conclusión debe ser que el Levante está salvado... y punto.

Ficha técnica:

0 - Real Valladolid: Masip; Antoñito, Kiko Olivas, Salisu, Nacho; Hervías (Toni Villa, m.73), Alcaraz, Míchel (San Emeterio, m.83), Waldo (Guardiola, m.63), Óscar Plano; y Enes Ünal.

0 - Levante UD: Aitor Fernández; Coke (Jorge Miramón, m.69), Rubén Vezo, Postigo, Toño García (Clerc, m.69); Campaña, Vukcevic, Rochina (Hernani, m.63), Bardhi; Mayoral (Sergio León, m.78) y Roger Martí (Morales, m.78).

Árbitro: Medié Jiménez (Comité catalán). Mostró cartulina amarilla a Waldo (m.28) y Míchel (m.45+), del Real Valladolid, y a Bardhi (m.16), del Levante.

Incidencias: partido correspondiente a la trigésima tercera jornada de LaLiga Santander, disputado en el estadio José Zorrilla. Antes de comenzar el choque, se guardó un minuto de silencio en memoria del que fuera presidente del Real Valladolid, Gonzalo Alonso.