Un delantero fuerte, potente, con gran juego de espaldas a portería y dominio en el apartado aéreo. Así es Adolfo Gaich, ariete que ha estado siguiendo el Levante y que pertenece a San Lorenzo. El futbolista, de solo 20 años y 1,90 de altura, ha entrado en ese momento de dar el salto en su carrera. Por condiciones y proyección, la confianza en Argentina es total. El 'jefe' del ataque de la Albiceleste en el Sudamericano Sub-20 y en el Mundial de la misma categoría, también estuvo en la Comunitat Valenciana disputando el COTIF, y en el futuro aparece la absoluta como uno de los grandes objetivos.

Es un jugador distinto al perfil que tiene el Levante y por eso encajaba. Lejos del área ofrece grandes recursos pero donde verdaderamente explota es cerca de la misma. Eso sí, el recurso de un balón largo para encontrar una peinada o una segunda jugada también aparece entre sus habilidades para mejorar al colectivo. Diestro, y no demasiado rápido, es un seguro de vida en el choque, pero también en la gestión de espacios a su alrededor. Todavía por madurar, el delantero sí tiene algo importante para un '9': el gol. Tiene buena definición, sobre todo al primer toque, y además sabe buscarse el espacio incluso siendo el único punta, sin necesidad de compartir ataque con otro ariete más.

Es el perfil de delantero que está para fichar en estos momentos, porque con un año más en Argentina, o un salto a Europa actual a otro equipo, en un año su precio, sobre todo de traspaso, sería prohibitivo. Y es que, aunque tiene que mejorar sobre todo en lo técnico (es un jugador no excesivamente hábil en el regate), tiene condiciones por físico y olfato de gol que le hacen apuntar a un futbolista similar, salvando las distancias, a Maxi Gómez y su salto al Celta de Vigo. De Defensor Sporting a Balaídos y de ahí a un salto mayor.