Un año después de su regreso junto a Manolo Salvador ha sido noticia por desestimar una oferta del Espanyol. Todo apunta ahora a la renovación de una novedosa área deportiva dispuesta desquitarse con fichajes propios después de no haber podido hacerlos el último año. Como demuestran los primeros, la Segunda se perfila como un gran caladero.

— Radoja y Duarte fueron los únicos fichajes del actual área deportiva el último verano. ¿Están dispuestos a desquitarse?

—Hemos hecho ya dos fichajes nuestros (Malsa y Son), pero tenemos muchos jugadores aún en plantilla. Queda un trabajo de salidas por hacer. Estamos empezando con lo que hemos podido trabajar durante el año, aunque no tenemos esa capacidad para poder hacer al cien por cien lo que queremos. Hemos adelantado dos fichajes que vienen de Segunda y hemos tenido que pelear con clubes de Primera y extranjeros. La Segunda es más importante que la Primera de otros países. Un jugador que firmamos libre en Segunda fuera te puede costar 10 millones. Los tienes más cerca, los controlas más y están adaptados a España. Manejamos mucho ese mercado, puede llegar algún jugador más.

—¿Para los fichajes del central y el delantero hay que esperar a hacer alguna venta?

—Tenemos muchos jugadores en plantilla y hay que sacar para que puedan entrar, es evidente, son números. Respecto al central, estamos contentos con Óscar Duarte, que aunque no ha jugado mucho ha respondido muy bien y en los últimos partidos ha estado a un nivel muy alto. En principio continuaremos con esos centrales. Ora cosa es que alguno nos pida salir. La recuperación de Róber Pier es importante. Respecto al delantero, Borja Mayoral vuelve al Real Madrid y la intención es que pudiese quedarse con nosotros pero es difícil por el año que ha hecho.

—¿Era Gainch la primera alternativa a Mayoral?

—Hemos estado ahí. Al final se ha ido a un liga extranjera. La ventaja de Mayoral es que está a gusto, que encaja en el sistema de Paco y que Paco lo quiere. Pero seguro que Mayoral va a tener clubes extranjeros. Es una operación compleja. Contamos que el jugador está contento.

—¿Cuánto cuestan jugadores como Campaña, Aitor y Bardhi?

—No hay un precio fijado, pero no están a la venta. Tiene que ser una propuesta muy alta y el jugador estar de acuerdo. No se van a malvender porque no hay necesidad. Queremos que estén en la plantilla.

—¿Cómo de incómodo es para el área deportiva el margen del fair-play y qué factura economico va a pasar la crisis de la Covid?

—El problema es que tenemos 32 jugadores y que con Malsa y Son el número aumenta. No podemos tener tantas fichas y nos perjudica que los salarios, con todo lo que ha pasado con la pandemia... Es difícil que puedan salir. Estamos trabajando en ello.

—¿Cómo va la renovación de Rochina y la mejora de Roger?

—Estamos en las primeras tomas de contacto. Roger tiene tres años más y a Rochina le queda uno y es un tema más delicado. Vamos a ver si llegamos a un acuerdo.

—¿Les preocupa que Roger pueda irse por 12 millones?

—Roger tiene una cláusula más alta, por eso estamos tranquilos. Nos ha dado mucho y el club puede tener un detalle con él. Esa cláusula (de escape) no es así. En caso de que venga algún equipo con una oferta de 12 millones hay que recompensarlo pero no es ninguna obligación igualarlo. De momento no ha venido nadie con alguna oferta.

—¿Para cuándo la renovación de Morales?

—Le queda un año de contrato también. No va a haber problema, ya lo dijo Quico. Llegaremos a un acuerdo. Tanto por el club como por ‘Moro’ se trata de una unión de muchos años. No hace falta hacerlo este verano. La intención de las dos partes es seguir.

—¿Qué va a pasar con Dwamena?

—Es una inversión muy fuerte y lo que ha ocurrido es una lástima. Estaba haciendo un gran año y habían llegado clubes que estaban interesados. A nivel personal es un ‘10’ y nos sabe muy mal. Él quiere jugar y está dispuesto a hacer todo lo posible pero es difícil que pueda hacerlo. No pierde la esperanza. Vamos a facilitarle las cosas que necesite porque somos un club que respeta a sus jugadores. Estamos abiertos, pero dentro de una seguridad. Si no pasa nada seguirá en el club sin poder jugar. No sé cómo terminará esto, pero es un tema que lo llevan los abogados con los agentes. Jugó un año en Suiza y confía mucho en un médico de allí.

—¿Y con Doukouré?

—Es una pena porque después de un año con el cruzado se había recuperado. El Huesca estaba muy contento con él y ahora tiene una lesión igual de grave o incluso de más tiempo. Confiábamos en que podía dar resultado y quedarse en el Huesca en Primera División.

—¿Hay ya una decisión tomada con Pepelu?

—Ha hecho un gran año en Portugal. A ver en pretemporada el nivel que da pero no se ha tomado ninguna decisión. Tampoco ningún club nos ha presentado una oferta. Cantos de sirena sí que ha habido.

—¿Cuál es su balance de la temporada?

—Estamos contentos. Podría decir que ha sido de notable porque a diferencia de la temporada pasada hemos conseguido la salvación sin sufrir mucho. Te queda el sabor de lo que ha hecho el Granada y el objetivo de tener más aspiraciones a la próxima. Pero estamos muy contentos con lo que se ha conseguido. Sólo hay que ver que clubes como el Espanyol con una inversión tan fuerte han descendido.

—El Espanyol precisamente… ¿Tendrán que renovar, no?

—Fue una propuesta real de tres temporada. Conozco a Rufete de la etapa de futbolista, siempre hemos tenido contacto y nos llegó una propuesta por Manu (Fajardo) y por mí. Pero hablamos con el club y decidimos apostar. Renovar no es algo que nos quite el sueño. La decisión es del club y nosotros vamos a trabajar al cien por cien para mejorar la plantilla.