Después de unos días de tira y afloja, todo está preparado para que a lo largo de este lunes se cierre la cesión de Pepelu al Vitoria de Guimaraes. Finalmente, tal y como era deseo del Levante, sin opción de compra. Tras su primera experiencia en el Tondela, el dianense volverá a la Liga Nos para enrolarse esta vez en un equipo de mayor vuelo.
Sin opciones de traspaso en un escenario marcado por la crisis del mercado, la balanza se ha decantado por Portugal antes que por alguno de los equipos de Segunda que han mostrado interés. La voluntad del propio jugador ha sido clave para enrolarse en un proyecto de más valor como el de Guimaraes. A efectos tanto deportivos como de cotización lo considera interesante. Se marcha, eso sí, con la espina clavada de no haber tenido más oportunidades.
El acuerdo está encarrilado. Ha sido rápido, pero no sencillo por el caballo de batalla de la opción. La primera propuesta del Vitoria era de apenas un millón, aunque de ahí fue subiendo. Sin embargo, en ningún momento llegó a los cinco por los que el Levante habría podido abrir la mano. Esa cantidad es justo la que se ha pagado en porcentaje al Real Madrid por De Frutos y Dani Gómez.
De momento, pese al valor sentimental y deportivo del futbolista, tampoco habrá renovación. La posibilidad se puso sobre la mesa hace dos viernes en la reunión en la que se comunicó su situación deportiva. El club, con muchísimas dudas a nivel interno respecto a perder el control sobre su futuro, decidirá antes de final de curso si ejerce la opción unilateral de ampliarle hasta 2022.
