Sin perder de vista la posibilidad de otro extremo, el Levante UD tiene pendiente el fichaje de un delantero y uno de los nombres que revolotean a su alrededor desde la semana pasada es el de Christian Stuani. No en vano, con una cláusula de escape tras no ascender con el Girona, el club granota es uno de los muchos a los que está siendo ofrecido. Sin embargo, los planes no pasan por él. Al menos no de momento ni en las circunstancias en las que se plantea la operación. En Orriols tampoco contemplan bajo ningún concepto vender a la baja a Campaña, Bardhi o Aitor para cuadrar los números del fair-play, aunque también es cierto que no han llegado ofertas por ninguno de los tres.

Con la operación salida a fuego lento, los granotas están atados de pies y manos. No pueden afrontar ningún refuerzo más hasta que no se produzcan salidas. Y todavía menos del caché de Stuani. A sus 33 años, el Matador de Tala tiene un contrato de cuatro millones repartido en tres temporadas. Sus aspiraciones pasan como mínimo por uno de dos fijos más otro opcional. Además, tan cierto como que viene de marcar 31 goles en Montilivi es que los informes alertan de un historial con molestias de pubis de las que tiene que tratarse desde el verano pasado. Sus representantes están estudiando opciones en el extranjero, sobre todo en Italia.

Contando con la rescisión de Ivi y la cesión de Pepelu siguen sobrando tres fichas profesionales. Luna y Fran Manzanara están descartados pero se mantienen a las órdenes de Paco López, mientras que Dani Cárdenas saldrá cedido. De estos tres no hay duda de que el más problemático es Luna por el espacio que ocupa su sueldo en el fair-play. Ocurre parecido con Sergio León y Hernani, también con el cartel de transferibles. En menor medida incluso con Coke, que tiene a Son y Miramón por delante, si bien en su caso los galones pesan.

La situación de mercado del Levante también hace imposible la opción de repescar a Borja Mayoral, todavía sin destino y a las órdenes de Zidane. Ni las opciones del Valencia ni las de Italia han cuajado, pero para los granotas es inviable asumir de nuevo su ficha más el traspaso al que aspira el Real Madrid. Semanas atrás se trasladó una oferta por el argentino Gaich, que finalmente recaló en Rusia.