De aquí al 5 de octubre hay tiempo, aunque no sería la primera vez que el Levante ficha sobre la bocina del mercado. Con cuatro semanas por delante hay todavía margen a la espera de finiquitar la operación salida y liberar tanto fichas como espacio en el fair-play. Como ocurre en tantos otros clubes, se trata del principal handicap en el granota a la hora de apuntalar una plantilla con cuatro caras nuevas (Son, Malsa, Dani Gómez y De Frutos) y en la que Borja Mayoral es el único ausente de la columna vertebral.

Al no haber vendido a Campaña, Bardhi y Aitor, por los que ni han llegado ni se han buscado ofertas, ahora mismo el desfase económico viene por casos de transferibles con sueldos elevados como Hernani y Sergio León o un descarte como Luna. En cuanto a las fichas, sobran mínimo tres para hacer 25 teniendo en cuenta que Manzanara y Cárdenas van a cambiar de aires y que aun así la idea es que termine llegando un delantero más y en función de las posibilidades otro extremo. Sin descartar a un portero.

Precisamente en el apartado de llegadas es donde el Levante sigue haciendo números. El desembolso en traspasos en lo que va de verano se limita a los cinco millones por la mitad del pase de Dani Gómez y De Frutos, por lo que las cantidades en las que se mueve el mercado son prohibitivas, al menos por los futbolistas en la órbita levantinista. La mayoría de clubes piden traspasos importantes y para las opciones de cesión con opción de compra sigue siendo temprano.

Mayoral es el preferido pero en la carrera por su fichaje no está el Levante, al menos de momento, ya que las cantidades a las que aspira el Real Madrid están fuera de su alcance. En la órbita de muchos clubes pero sin nada claro, el de Parla sigue a las órdenes de Zidane. Ante un cambio de planes con la fórmula de su salida, el Levante volvería a estar ahí, pero mientras tanto se sigue haciendo camino.

El mercado de puntas se empezó a peinar mucho antes, especialmente con las opciones del mercado de Francia: Guirassy, Mavidivi y Djitté. El que más gustaba es Guirassy, por el que el Rennes acaba de pagar la friolera de 15 millones de euros. El traspaso de Mavidivi al Montpellier tampoco ha sido barato: seis. Al mismo tiempo su hueco en el Dijon lo ocupará Assalé, exjugador del Leganés que también fue ofrecido.

De Gaich a la opción Stuani

El Levante no pasó oferta oficial por ninguno de los candidatos de la vía francesa pero sí lo hizo a mitad de julio por Adolfo Gaich, al que el interés granota le vino bien para apretar al CSKA de Moscú. La operación se concretó por 8,5 kilos para San Lorenzo más el 20 por ciento de la plusvalía. Desde entonces se ha estudiado a jugadores preferentemente con experiencia en LaLiga, aunque sin que económicamente ninguno cuadre. En especial Stuani, un viejo conocido que deportivamente encaja como un guante pero también una operación de riesgo y coste elevado que se dispararía a los 3,5 o 4 millones.

Mientras se sigue deshojando la margarita, el Levante tiene abierta una negociación para premiar a Roger, su mejor artillero, más un acuerdo apalabrado por Morales, que entra en su última temporada de contrato pero no firmará hasta que se termine el mercado. Dani Gómez y Sergio León, ambos disponibles para Mestalla, completan el abanico actual de Paco López.