Granada se ha convertido en un viaje que marca el pulso de la actividad granota en los últimos años. Lo hizo el curso del descenso, con fatal desenlace, y también el año pasado cuando en un contexto muy parecido al actual, el cuadro de Paco López viajó a Andalucía en busca de tres puntos que pusieran fin a una racha de solo una victoria en tres partidos. Y lo cierto es que las cosas no pudieron salir mejor en territorio nazarí.

En un duelo marcado por las defensas, el segundo tiempo dio paso a esa gran actuación granota. Rochina marcó desde lejos con un zurdazo ante el que poco pudo hacer Rui Sila. La alegría sin embargo, como ya pasó hace unos días ante el Celta de Vigo, no duró demasiado. Cinco minutos tardó Darwin Machís en hacer el 1-1 para provocar cierto nerviosismo en el conjunto granota. A pesar de eso, el duelo se cocinó a fuego lento y aunque sin excesivas ocasiones, el Levante encontraba poco a poco zona de remate en campo rival. Hasta que llegó el momento del gol de Bardhi. Sobre la bocina. En el minuto 89’ y con un disparo también desde la frontal del área. Los tres puntos volaban al Ciutat y además tras un análisis al detalle del entrenador, como así reconoció tras el partido Rochina. «Tenemos la suerte de analizar en vídeo y habíamos visto que se hundían bastante dejando la frontal desprotegida. He visto una posición buena y no me lo he pensado. Ha sido gol», explicó el centrocampista.

El trabajo semanal había dado sus frutos a una plantilla que tenía en mente ganar puntos cuanto antes para espantar esas posibles dudas en unas semanas en las que todo estaba en contra. Incluidas las lesiones. Y es que una semana antes de ese sufrido triunfo contra el Granada, escenario que visitará el cuadro granota este domingo a las 18:30, había perdido contra el Valencia en el Ciutat de València con una defensa de urgencias y tras una remontada de los de Celades en el segundo tiempo.

Curiosamente después de esa jornada, el Levante tuvo que recibir al Celta de Vigo en casa y ahí también certificó una nueva victoria. Seis de seis. Los primeros tres de momento se han esfumado para los de Paco López ante los gallegos y solo se pudo sumar uno, un botín en el que tuvo gran parte de culpa Melero López, impidiendo que el tanto de Dani Gómez subiera al marcador.

La figura de Malsa

El centrocampista fue uno de los mejores en el duelo contra el Celta de Vigo en La Cerámica. Exquisito en el robo, pero sobre todo en su conocimiento de la posición para efectuarlo de la manera más limpia posible. Siempre anticipando lo que iba a suceder y dando una solución fácil. Él está contento, la adaptación ha sido buena y como reconoció ayer «el equipo está bien mentalmente y hay que seguir trabajando». «La verdad es que me siento muy bien ahora mismo. Después del coronavirus, ahora me siento bien con la ayuda de los compañeros y cuerpo técnico. El clima de València... para mí es una ciudad para estar bien. Me gusta la mentalidad. Es un club familiar y con buena gente. Para mí eso es lo más importante», reconoció el jugador, quien también habló del próximo duelo. «Tuvimos mala suerte contra el Celta. Ahora a pensar en el Granada», destacó.