El próximo campeón de MotoGP -si una desgracia en forma de caídas no lo impide- ya no acabará el Mundial de vacío. Joan Mir había hecho méritos más que suficientes para ganar el campeonato de la categoría reina más loco de los últimos años, en ausencia del 'rey' Marc Márquez. Pero si había algo que podía molestarle hasta este domingo 8 de noviembre era el hecho de que muchos pusieran en duda los méritos de un campeón que podía coronarse sin ganar carreras. Ni habría sido el primero ni será el último, pero con su triunfo de ayer en Cheste, no tendrá que escuchar esa cantinela más. Ganar como hizo Quartararo y no ser regular no sirve para mucho. La constancia y la regularidad tienen también mucho mérito, como los Mundiales que ganaron Champi Herreros o Emilio Alzamora en 1989 y 1999.

Cara y cruz en Moto3

La caída de Jaume Masià fue un jarro de agua fría para el motociclismo valenciano. Tenía y sigue teniendo opciones de luchar por el Mundial de Moto3, pero este domingo se le escapó una oportunidad de oro en una carrera en la que no puntuó el líder, Albert Arenas. El 'cero' en Cheste del de Aspar aún le deja con opciones al seguir a 24 puntos del líder, pero ya con una carrera menos y más rivales. Salir el 28º le obligaba a ir al límite para remontar y en esas condiciones, acabar o no se convierte casi en una lotería. Pero si él fue la cruz entre los valencianos, la cara llegó con Sergio García Dols y Carlos Tatay. El de Borriana ganó el año pasado en Cheste y ayer volvió a subir al podio. Pero lo mejor es su autocrítica. Sabe que debe ser más regular en otros circuitos y esa es su principal lección de cara al próximo año, ya en el Aspar Team. Tatay, además, logró su mejor resultado acabando sexto.

Remontadas de casa

Héctor Garzó, Jorge Navarro y Arón Canet acabaron en los puntos tras unas meritorias remontadas. Sin sus malas posiciones en parrilla, alguno podría haber luchado por el podio, pero habrá que esperar al próximo fin de semana, también en Cheste. Allí esperamos ver ya a Lecuona en MotoGP tras su cuarentena obligada en Andorra.

Más opiniones de Jorge Valero.