Al flamante Wanda Metropolitano los rojiblancos han llegado andando, en bicicleta y en metro sin problemas. Incluso en moto. Aparcando muy cerquita del estadio. Aunque algunos moteros no las tengas todas consigo. Porque los coches lo han tenido más difícil. Algunos se han llevado las primeras multas metropolitanas. Otros las han evitado in extremis.