El marisco es uno de los mayores lujos gastronómicos. Suele ser sinónimo de una gran comida y nos evoca a los tiempos de Navidad. Sin embargo no deberíamos restringirlo siempre a esta época del año si fuera más sano. De hecho no es tan malo para la salud como parece: el problema suele estar en las cantidades.
Comer estos ricos alimentos es factible si moderamos el número de piezas que consumimos y optamos por una opción saludable. Afortunadamente la hay. La clave es buscar mariscos ricos en omega-3, un tipo de grasa muy beneficiosa para la salud. Incluso es compatible con las dietas para adelgazar.
Trucos para comer el marisco más sano
Conocer es clave para comer con acierto. Lo más importante es consumir siempre alimentos naturales y huir de preparados en conserva como el salpicón, que a menudo cuenta con unas cantidades disparatadas de sal que pueden causar hipertensión.
También hay que saber que no todas las partes son iguales. Las cabezas de las gambas son la parte preferida por muchos pero debes saber que es la que contiene la mayoría de las propiedades nocivas: desde altas cantidades de colesterol hasta cadmio o mercurio. Sin embargo, si nos ceñimos a la carne de estos animales podemos comerlos semanalmente sin preocuparnos.
La cola de gambón crudo de Mercadona, una delicia gastronómica muy saludable
La afamada cadena de supermercados ha lanzado un marisco que reúne todos estos requisitos. Se trata de unas colas de gambón crudo: es uno de los crustáceos más sanos, viene sin cabezas y no tiene ningún tipo de conservante al venir congelado. Se pueden comer como plato principal o integrarlo en recetas de arroces, ensaladas, pasta o pescado.
Este producto viene en paquetes de 250 gramos, de los cuales un porcentaje interesante son proteínas. Las grasas son de las más sanas que hay. Eso lo convierte en una opción gastronómica para cualquier momento del año y desmonta el mito de que solo podemos comer marisco en Navidad.
