La antigua Prisión Provincial de Málaga, que en 2009 cesó de acoger presos y permanece desde entonces esperando su uso como espacio cultural, luce su otra cara, la cinematográfica, convertida en un centro de música urbana al más puro estilo de El Bronx neoyorquino para ‘Urban. La vida es nuestra’. La serie, que estrenarán Amazon Prime Video y Mediaset, está apurando en la ciudad andaluza un rodaje exprés que llegará a su fin el 28 de febrero. Una cortina de tiras de plástico de color amarillo con la inscripción 'Palace' en una de sus puertas de acceso ya anticipa el uso que se le da en la ficción: el de un espacio anárquico y clandestino donde los jóvenes conectan a través de la música.

Recorridas las estancias, que, inevitablemente, siguen produciendo inquietud si uno empatiza con lo que allí sufrieron sus involuntarios inquilinos cuando aún era un centro penitenciario --muchos de ellos republicanos represaliados tras la Guerra Civil-- , aparecen, entre espectaculares grafitis elaborados para la ficción por el malagueño Lalone, María Pedraza, Asia Ortega y Bernardo Flores. Los actores, que dan vida a sus protagonistas, graban una de las muchas secuencias que les esperan en esa larga noche de rodaje del pasado viernes, al que pudo asistir EL PERIÓDICO, del grupo Prensa Ibérica.

Una historia de fracasos

Lola (Pedraza), Yanet (Ortega) y Patrick (Flores), los personajes de este drama ‘new adult’ producido por Mediaset España y Alea Media, son dos chicas y un chico que luchan por su sueño: el de triunfar en el mundo de la música urbana. Sin embargo, a diferencia de otras series juveniles de corte aspiracional, la suya es la historia de tres jóvenes unidos por el fracaso. Las chicas se conocen en Madrid, procedente una (Yanet) de una Málaga que había abandonado (y junto a ella a su familia y a su novio) para ser una estrella de la música, y la otra (Lola), de una familia acomodada de la capital . Ambas deciden emprender un viaje a la ciudad andaluza, volviendo a sus orígenes la primera, y huyendo de los suyos, llenos de frustraciones y un pasado no resuelto, su inesperada compañera. 

Allá se encontrarán a Patrick, un joven trapero mexicano que sobrevive solo tras regresar sus padres a su país. Carismático y con alma de líder, lo que lo convierte en el rey del barrio, es el que tiene más posibilidades de lograr su sueño y salir de él. La vuelta de su ex, Yanet, siete años después de su abandono, le reavivará muchos sentimientos. Además, se trae a la misteriosa Lola, que se acaba convirtiendo en su musa. Los tres inician una relación con forma triangular en la que confluyen el amor, el conflicto y las noches sin fin. El ego, la rivalidad y las cuentas pendientes marcarán su nueva vida. 

Los personajes

“Patrick es un chico que ha crecido en las calles, pero tiene un buen corazón. Sueña con ser un Maluma, un C. Tangana, un Bad Bunny. Irá desarrollando una avaricia y egoísmo, aunque, como la serie habla de los errores, recapacita y pide perdón”, cuenta el joven actor que daba vida a un secuestrador en ‘Exprés’. María Pedraza, actriz que se dio a conocer en ‘La casa de papel’ y hemos visto en proyectos de éxito como ‘Élite’ y ‘Toy Boy’ sorprende aquí rapeando. “Cuando era pequeña cantaba karaokes, con lo que este era uno de mis sueños. Pero Lola no canta, sino que cuenta. Sara Sokas es mi inspiración”, confiesa. Asia Ortega ha transmitido parte de su arrolladora personalidad a su personaje: "Yanet era en principio una chica que cantaba pop. Para el 'casting' me preparé 'Catalina', de Rosalía, y al final es una chica con raíces flamencas, aunque con tintes urbanos", explica la catalana.

“Hemos manejado referentes como 'Ocho millas', ‘Cómo mandarlo todo a la mierda’, 'In my skin', 'Cardo'... Pero, al final, el único referente de ‘Urban’ es ‘Urban’. Hemos apostado por un tono y estilo y una identidad propia”, asegura Jota Aceytuno, el productor ejecutivo de la serie junto con Arantxa Écija, y autor material de la idea. La ficción, que está compuesta por seis capítulos de 50 minutos de duración y la dirigen Koldo Almandoz y Jota Linares, cuenta, asimismo, con una potente banda sonora compuesta por los músicos Víctor Elías (el Guille de ‘Los Serrano) y Jaime Vaquero, autores de canciones que abarcan el género urbano: batallas de gallosel rap más puro y otras composiciones más movidas que fusionan diferentes subgéneros.

La estética y las localizaciones

Además de la música, tienen mucha importancia su estética, a base de planos con cámara al hombre y penumbras, y las localizaciones. La Málaga de 'Urban' huye de la imagen de postal a la que estamos acostumbrados (aunque aparezca La Malagueta, por exigencias del guion, y el Mirador de Gibralfaro) para mostrar el arte urbano de Lagunillas, las batallas de gallos improvisadas en la ribera del Guadalmedina, la apuesta por la formación y promoción cultural de La Térmica, el paisaje de Sacaba Beach, la rutina de barrios obreros como Miraflores y Cruz de Humilladero. Un conjunto que puede resultar de gran atractivo para los jóvenes. Aunque 'Urban' aspira a llegar a más públicos. "Tiene la música y la cultura urbana muy presente, pero es un telón de fondo. La serie es una historia sobre el fracaso. Y en el fracaso, el miedo y la frustración nos encontramos todos”, concluye Aceytuno.