Debió sonreír hacia sus adentros Mateu Alemany cuando el otro día le preguntaban si el Valencia CF solo iba a fichar futbolistas muy jóvenes, de esos que vienen para venderlos en dos o tres años y sacar un beneficio económico, como puede ser el caso de Racic o Diakhaby. Lo haría seguro porque la pregunta se la hacían horas antes de que dejara prácticamente cerradas dos operaciones por dos futbolistas que, entre uno y otro, suman 60 años. Queda claro que el club va a apostar y a arriesgar por esos futbolistas, de la cantera como Ferran Torres y también de fuera, pero eso es solo una parte del plan, porque uuna cosa es arriesgar y otra experimentar. El equipo, para competir al nivel que debe y eso Marcelino y Mateu lo saben perfectamente, necesita también estos jugadores más veteranos que te dan otras cosas, de hecho el entrenador empieza a sonreir también con la llegada de Gameiro y Wass. Esto no es aquello del verano de Danilo, Bakkali, es otra cosa y entre otras cuestiones porque los errores el pasado están para aprende de ellos. Si tiene que venir alguno más de esos jóvenes talentos, que sea portugués y se llame Gonçalo Guedes. Ese ya sabemos que es muy bueno, aunque precisamente por eso ya no vale dos ni quince ni veinte, sino mucho más.

Cuando empieza a rodar el balón cada uno sacamos el entrenador que llevamos dentro para hacer las alineaciones, mientras el deporte nacional es hacer de director deportivo. Quiero decir que Daniel Wass y Kevin Gameiro nos podrán gustar más o menos, esto es fútbol, pero vienen dos jugadores que han elegido el Valencia CF por delante de otras muchas opciones en diferentes países, contrastados y con hambre a pesar de que están alrededor de la treintena, que le encajan al entrenador y tienen un coste que el club ha podido asumir. Son refuerzos de verdad porque ofrecen muchas cosas al equipo, y eso es lo que necesita en realidad el Valencia para competir en una temporada que va a ser muy muy dura.

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