La venta de Guedes: la decisión del Valencia que le hace grande o le hunde

Estoy convencido de que se podrían sacar hasta 35 millones, en cuyo caso habría que tomarse el tema mucho más en serio

Toni Hernández

Toni Hernández

Toni Hernández

Toni Hernández

El Valencia no puede vender a este Gonçalo Guedes por 25 millones de euros. Sería un robo a mano armada. Y en esto, creo, estaremos todos de acuerdo. Si alguien nos hubiera dicho en febrero que por el Guedes que estábamos viendo en ese momento, alguien pondría 25 kilos sobre la mesa 6 meses más tarde, le hubiéramos invitado a otra ronda de Jägermeister, que sería lo más flojo que habríamos pensado que llevaba en el cuerpo el perpetrador de semejante frase. En esto creo que tampoco vamos a discutir. El Valencia, es evidente, se encuentra ante la toma de una decisión que lo puede hacer un poco más grande o lo puede hundir en la miseria. Tomar decisiones en base a análisis y no sólo a momentos y situaciones. ¡Qué rematadamente difícil con J es eso!

Desde el sofá de casa, o desde el escritorio donde estoy redactando este artículo, es fácil decir, como si fuera un predicador enfervorecido, que venderlo, por ese precio, es un sacrilegio. Repito, quien suscribe lo piensa. Y estoy convencido de que se podrían sacar hasta 35 (Mendes seguro), en cuyo caso habría que tomarse el tema mucho más en serio. Aunque también tengo claro como el agua que el problema no es vender a Guedes, o a quien sea, sino el miedo que todos tenemos, con fundamento, a que Meriton luego no traiga a nadie, tal y como pasó el anterior verano. ¿Qué eso no va a suceder? Vale, me parece que no, pero no seré yo quien emplee ni medio segundo en intentar convencer a nadie de ello, porque al 100%, tampoco me lo creo. Esa es la triste realidad que nos rodea ahora mismo. 

El Valencia tiene que vender a Guedes, pero no a cualquier precio. Y tiene que hacerlo para armar un equipo más fuerte, no por el simple hecho de seguir soltando lastre. Si la salida del luso sirve para traer a un mediocentro defensivo y otro delantero, el equipo pierde calidad pero gana fortaleza. Cambiar uno muy bueno por dos, que en teoría también lo son aunque menos, y que encima quiere el entrenador. Meriton no puede volver a meter la pata con esto, porque es tan sencillo como beber agua de un botijo. No malvender. Y en caso de venta por el precio exigido, dos fichajes de forma inminente, que deberían estar apalabrados ya. Y me consta, como en el mercado de verano del año pasado, que Corona tiene acuerdos con varios jugadores a la espera de tener dinero.

Tres apuntes más para acabar, y creo que hoy no voy a enfadar a nadie, con lo que el artículo será peor de lo normal. Con todo el cariño que le tengo a Javi Garrido, Kang in Lee no se puede ir de aquí con la carta de libertad. O traes algo o te tienes que pasar un año en blanco. El debate en la portería del Valencia tampoco debería existir. Mamardashvili es un portero como la copa de un pino, pero tiene que jugar Cillessen por muchas cosas. Y a ser posible, sin que se lesione más. Y para acabar. Señor Peter Lim, le han puesto a huevo terminar el Nuevo Mestalla y ser del que corte la cinta el día de su inauguración, y encima pagando otro. Ese caramelo no se puede dejar escapar, porque sería de animal mitológico: mitad perro, mitad burro.