Opinión

Pedro Gonçalves y el gran problema que tiene Paterna

El portugués, que pasó por Paterna, brilla en Champions League con el Sporting de Portugal

Pedro Gonçalves

Pedro Gonçalves

El pasado miércoles, las luces de la Champions alumbraban a una nueva estrella. La irrupción de Pedro Gonçalves en el Sporting de Portugal dejó sin Champions al Borussia Dortmund de Haaland. ‘Pote’ se sacó de la chistera un doblete que pudo ser hat-trick… si hubiera marcado el penalti para poner la sentencia al partido. Cuatro goles y tres asistencias en apenas tres partidos de Copa de Europa. Datos que procedo a poner en cuarentena. La mitad de esos goles llegan contra el peor equipo de la competición, el Besiktas de Michy Batshuayi. La otra, tras sangrar a Schulz y Pongracic, jugadores que probablemente no le suenen y con razón: fueron titulares en el Dortmund pero no jugarían en este Valencia de entreguerras. Seguramente Gonçalves, con sus 34 goles en 52 partidos con el Sporting, tendría más posibilidades. Pero sus dos temporadas en el Valencia no convencieron.

Las cifras de Pote llevaron al universo fútbol a bucear en su trayectoria y descubrir, para asombro de quien les escribe, que el chico que asombra a la Champions pasó por Paterna de la mano de Nuno. Generación del 98, la del juvenil de Mista con Carlos Soler, Gonzalo Villar, Sivera, Fran Villalba, Toni Lato o Rafa Mir. La que se quedó sin semis de Youth League en aquella infame tanda de penaltis ante el Chelsea... y en la que él no podía jugar, por impedimento de la FIFA al haber llegado como menor de edad. En su segundo año, se marcharía gratis siguiendo los pasos del técnico que le trajo: rumbo a los Wolves. Quería hablar de Pote como ejemplo de oportunidad desperdiciada por el Valencia y, en la definición, ya aparecen un centrocampista de la Roma que no llegó a debutar con el primer equipo y el nueve titular de un Sevilla de Champions.

Anil Murthy, al que poco crédito le queda ya, decía tras la salida de Marcelino que el modelo del Valencia es poder hacer un equipo campeón con mayoría de jugadores criados en Paterna… y en la primera generación juvenil manejada por la gestión singapurense encontramos unas cuantas perlas huidas que fácilmente podrían ser titulares el próximo fin de semana. No es el mayor mal del Valencia, pero en tiempos de escasez económica, cabe agudizar el ingenio, conocer tu casa a la perfección y adelantarte a situaciones como ésta. Mucho pedir para una dirección deportiva con recursos y capacidad de actuación limitada.

El delito no es dejar salir a Pote, al que el Wolverhampton tampoco le vio gran potencial. Que se te vayan canteranos por falta de oportunidades es parte del día a día de cada club de élite. El problema es que se vayan por falta de un proyecto que, más que atraerles, les eche del club. Ya se han ido hombres como Kang In Lee, un talento incuestionable llevado de la manera más torpe posible por todos: desde el club hasta el entorno del futbolista. Como Ferran Torres, por el que Meriton suspira; las migajas del mecanismo de solidaridad y el 10% de la plusvalía de su venta pueden ser un dedo con el que volver a tapar el sol. O los más preocupantes: ¿qué le van a vender a los dos grandes exponentes de esa cantera que quería ser campeona de algo? El gran problema que tiene Paterna es que, en la cúspide de la pirámide, cada vez hay menos que ofrecer.