Por muchas camisetas del Barça que le pongan, Gayà la que siente es la del Valencia. Y además de decirlo, lo demuestra. A sus 26 años ya ha entrado en el top-50 de jugadores con más partidos en el club y su renovación, que tal y como contamos está cada vez más cerca, va camino de convertirlo en un auténtico héroe de leyenda. Corazón y cabeza es lo que hace falta en un momento tan delicado como el actual. Y eso es justo lo que aportan el capitán y un Bordalás que con el golpe encima de la mesa ha conseguido frenar operaciones que no llevaban a ningún buen sitio. Algo se habrá adelantado si Meriton, empezando por el central, respeta la opinión del entrenador, no necesariamente trayéndole lo que él quiera sino simplemente no metiéndole con calzador lo que no. Tirar cohetes tampoco, sobre todo porque van ya tres semanas de enero, todavía no ha venido nadie y llegue quien llegue va a hacerlo tarde. Pero con la salida de Manu Vallejo, que dejará un pellizco en la caja, ya no hay excusa para empezar con la operación entrada.

El estadio

Fue una falta de respeto y una peligrosa práctica el veto a Sandra Gómez en la reunión del pasado martes. La regidora de urbanismo, fuera de la foto por su nivel de crítica hacia Meriton, representa a muchos ciudadanos que la han elegido democráticamente y a los que atañe lo que ocurra con el estadio, sean o no del Valencia. Se podrá estar de acuerdo en todo, en nada o en parte con lo que dice en la extensa entrevista que le hemos hecho, pero todo tiene trellat y mucha lógica. Hay que solucionar el problema en vez de complicarlo pero no vale todo con tal de conseguirlo. Y que conste que aunque el foco siga en el aforo, la clave está en que el Valencia y la ciudad no pueden permitirse un estadio que no esté a la altura, más allá de los espectadores que puedan entrar o no dentro.

Bardhi y Vukcevic

No le han ido bien al Levante las cosas con Mendes y que Quico esté con la rescisión de Vukcevic habla por sí solo. La noticia, sin embargo, es Bardhi. Tras muchos meses sin ofertas hay una opción en Italia que coge cuerpo.