Las excusas se olvidan durante 90 minutos

Cavani, durante el Valencia-Rayo

Cavani, durante el Valencia-Rayo / Francisco Calabuig

Pablo Leiva

Pablo Leiva

El Valencia tiene una final el domingo y durante la semana se habla de muchas cosas pero lo importante está ahí. En esos 90 minutos que no engañan a nadie. Si el algodón no engaña, la planificación de plantilla de Corona, quien dijo no ver ninguna posición demasiado coja, tampoco lo hace.

El duelo contra el Almería fue el primer ejemplo para ver lo que le sucede al Valencia tras cada pequeño golpe. Así sucede una vez tras otra durante una temporada en la que los 90 minutos han castigado las carencias de un bloque que no hizo las cosas bien con Gattuso, tampoco con Voro, y tampoco mejora en exceso con Baraja, a pesar de los dos triunfos en Mestalla.

Pero a pesar de todos los problemas, el Valencia debe olvidar todo eso y potenciar sus virtudes incluso a pesar de la ausencia de Kluivert, el mejor en ataque. Y yo ahí me pregunto, ¿serán capaces Cavani, Lino y compañía de ser diferenciales en la pelea por la salvación? De momento ya se ha visto que no. 

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