No va a ser una temporada más. El Valencia Basket, nuestro Pamesa, se presenta hoy ante su gente en el primer partido de Liga con la misma alma pero con una nueva cara, con otro aire. Y todos debemos ser conscientes de lo que nos jugamos. Tras unos años de bandazos y decepciones no hay lugar al error, por ello quizás todos los que aman el BA-LON-CES-TO saben que si las cosas se hacen mal el proyecto tiene fecha de caducidad. Todos deben apoyar.

Buenas vibraciones

De momento, el club que preside Vicente Solá, y el equipo, aunque todavía sufre algunas taras del pasado, transmite buenas vibraciones. Hasta el entrenador Neven Spahija no ha rehuido y asume con valentía que este equipo debe jugar mejor que el año pasado —tampoco será difícil— y tener los mismos objetivos mínimos, jugar las fases finales de los tres torneos e intentar ganar la Eurocopa, la puerta directa a la Euroliga.

Los octavos

Resulta curioso que todos nos mostremos más ilusionados y el técnico sea más ambicioso cuando, según los datos ACB, el club taronja ha pasado de estar entre el tercer y quinto presupuesto de la Liga a ser el octavo. Nos han adelantado por la derecha Bilbao Basket, Cajasol de Sevilla y DKV Joventut de Badalona. Lo que no entiendo es cómo tenemos mejor equipo cuando se ha pasado de un presupuesto de 16 millones —más despidos— a uno de 8,5. ¿Qué pasaba antes?. A lo mejor es que se empiezan a trabajar más con normalidad y se enreda menos. Y eso que Toni Muedra, el secretario del técnico, no para de moverse en la trastienda. El chico es inseguro.

Buen equipo

Hay un buen equipo, pero igual que exigíamos cuando se era el tercer presupuesto, hay que saber que ahora eres el octavo, aunque con peores condiciones se ganó la Copa y se jugó la primera final europea —pregunten a Miki Vukovic, un señor que va con el chándal del año pasado, siempre cerca de Neven, esperando destino—. Spahija, un coleccionista de títulos, sabe lo que quiere y ha preparado al equipo para empezar muy fuerte —¿aguantará la gasolina?—, consciente de que su margen de error es mínimo tras no demostrar nada la temporada pasada. Hay que confiar.

En silencio

Es bueno partir sin ser favoritos. En la encuesta a los entrenadores ni Spahija nos elige como equipo revelación —vota por el Cajasol— y no se destaca a nuestros jugadores. Neven sitúa a Claver en el quinteto ideal y aunque dice que espera que el base francés Nando De Colo destaque, apuesta por el ala-pívot israelí Lior Eliyahu —Caja Laboral de Vitoria— como la revelación. Pues yo creo que De Colo será la revelación. Claver debe asumir el liderazgo en su temporada clave. Matt Nielsen —segundo capitán del Valencia BC esta temporada— y Rafa Martínez son una garantía, mientras el serbio Kosta Perovic y el ucraniano Serhiy Lishchuk —que llegó a última hora como sustituto de Ermal Kuqo— van a sorprender, pero deben controlar las faltas. Por contra, Marko Marinovic y Rawle Marshall generan dudas.

Un club de patio de colegio

Es bonito empezar la Liga ACB ante el equipo, junto a la ´Penya´, con más aroma a basket. Un club de patio de colegio que se ha convertido en un clásico. Y encima ahora lo entrena un ex Pamesa Valencia, Luis Casimiro Palomo, debuta con ellos nuestro ex capitán, Albert Oliver, y lo preside un tipo de los que vale la pena haber conocido, Juan Francisco García, que vive entre Madrid y Valencia. El que fuera jefe de gabinete de la Generalitat Valenciana ha demostrado muchas veces su calidad humana y sus grandes dotes para la gestión política y deportiva. Una pena que disfruten en la capital lo que aquí otros no supieron valorar.