Lo primero que tengo que decir no tiene que ver con el fútbol, o sí...es lo mismo. Hoy lo primero que quiero hacer es mandar un fuerte abrazo a Mario Alberto Kempes, y sobre todo, desde estas líneas, enviare toda la fuerza del mundo para que supere este partido que tiene ahora, el más importante de su vida sin duda. Tuve la suerte de coincidir con Mario tres temporadas en el Valencia y es un tipo fantástico. De lo que fue como jugador de fútbol no hay nada que pueda decir que no se haya dicho. ¡Ánimo Matador!

Algunas conclusiones

Dicho esto, vayamos al fútbol. Buen resultado del Valencia en Anoeta y algunas reflexiones interesantes al respecto. Por delante hay que decir que fue un buen encuentro para el espectador, la Real Sociedad jugó muy bien, peleó mucho e hizo las cosas bien, pero no pudo ganarle al Valencia. Esa es la mejor noticia. El partido que ayer empató el Valencia muchos equipos de la Liga española lo habrían perdido.

El balón y Alves

Al equipo de Nuno le penalizó no tener el balón. Esa fue una de las claves del encuentro. Esa y Diego Alves, que evito que los vascos se pusieran por delante en el marcador, lo que habría sido una situación complicada. Cuando el Valencia se puso por delante con el gol de Carles Gil pensé que sería capaz de controlar el choque pero no fue así, y en ello tuvo mucho que ver el buen encuentro de los vascos. Creo que merecieron ganar, pero no supieron, por eso creo que el resultado es magnífico. Hay que pensar que no siempre se puede ganar, por ello empatar cuando puedes perder es un síntoma muy bueno para un equipo que empieza de cero. Pero ojo, el Valencia de Nuno no empata de suerte, empata porque hace cosas bien. Tiene pegada arriba, seguridad atrás y ayer mostró algo nuevo y muy interesante; sabe sufrir.

Sufrimiento

Por último la pareja de centrales Mustafi-Otamendi. Al alemán hay que darle más tiempo, pero creo que va a tener una dura competencia con el Vezo. Mustafi viene de competir a más nivel pero el portugués peleará el puesto. Ayer estuvieron seguros los dos por arriba, les benefició que el equipo jugó atrás y los delanteros tenían pocos espacios. Quienes sufrieron fueron los laterales porque la Real jugó bien y rápido por bandas.