Me llama un amigo que no me autoriza a decir su nombre ni a publicar lo que me dice pero da lo mismo, el caso es que Salva me dice: «Carlos, els valencianistes som uns fills de...en el que estàn fent i Mestalla ple». Yo le digo que así es, «així de grans som els valencianistes, el Valencia sempre per davant de tot». Me da la razón porque él es el primero que estará hoy en Mestalla y animará como un loco, y me hace pensar en todos aquellos que dudaban de la afición y auguraban poco y mal ambiente en el partido contra el Mónaco... la cosa está muy clara, no tienen ni idea de lo que es el valencianismo porque no han sufrido jamás por el Valencia; ya les ponen nombre ustedes que yo les dedico una canción de La Maravillosa Orquesta del Alcohol: «Hay un fuego dentro que nos guía desde niños, la llama se quema si detrás no hay un latido, hay un fuego dentro y será vuestro peor enemigo». Es el fuego del valencianismo...y como ya habéis comprobado, será vuestro peor enemigo.
La venta de Otamendi
Y sobre la compra
En un momento súmamente delicado para el Valencia Amadeo Salvo, Rufete y Ayala se la jugaron, ficharon a Otamendi por 12 millones, los crujieron a palos y año y medio después el Valencia lo vende por 45. Además, el tiempo ha demostrado que en lo que planificación deportiva se refiere, lo de Otamendi no fue que sonara la flauta, con aciertos y errores, queda claro que saben de qué va esto, y ahora hablo de Rufete y de Ayala. Que nadie haya dado una explicación de porqué no siguen es triste.
Ayuda para Nuno
Hasta la bandera
Escribí no hace demasiado que de Nuno solo espero que gane partidos que es su trabajo. Me mantengo. Ha demostrado ser buen entrenador y ahí están los números que hizo el Valencia la temporada pasada. Para esta el reto es mayúsculo pero estará menos solo de lo que él piensa porque su éxito es el de todos los valencianistas. Hoy comienza una nueva era en el Valencia y al señor Espirito Santo nos encomendamos por obra y gracia de Peter Lim. Repito, Nuno estará menos solo de lo que cree y lo comprobará cuando vea Mestalla lleno y animando a su equipo, sabrá en ese instante que no hay mejor manera de empezar a ganar un partido; Mestalla lleno hasta la bandera...
