Creo que el gran éxito de Voro, más allá de la alineación, es que los jugadores están tranquilos. No ha hecho otra cosa que protegerlos desde que asumió el cargo. El Valencia salió a Mestalla intenso y concentrado. Sin estresarse más que lo justo y necesario. Al fútbol se juega con la cabeza. El entrenador debe ser capaz de generar el clima idóneo para que los futbolistas puedan decidir bien en cada momento, y eso no se logra señalándolos permanentemente. Él conoce el vestuario mejor que nadie y sobre todo, es la persona idónea para pedir apoyo al equipo durante los noventa minutos. De hecho, hoy en día, Voro es el único que tiene ese crédito entre la afición. Y lo tiene porque se lo ha ganado a pulso. De Mestalla y los valencianistas nada nuevo; ellos también ganaron el partido. Por otra parte, ha quedado muy claro que al equipo le viene muy bien que la afición canalice su enfado contra Meriton porque los pitos no se los llevan los jugadores. Es perfecto.

Contaminadores escondidos: el fichaje de zaza

El Valencia ficha finalmente a Zaza pero los que decían que Suso lo quería fichar por tocarle las narices a Prandelli no dicen ahora que Alexanko lo ha fichado para tocarle nas narices a Prandelli. Será porque los contaminadores han dejado de contaminar. Mejor oye. Y luego está el tremendismo de que si Zaza es una operación ruinosa y no sé qué... He llegado a leer que la operación es una irresponsabilidad. A ver, no podemos criticar a Lim porque no quiere poner dinero para fichar a Zaza y cuando lo pone criticar a Lim porque la operación es cara... Seré claro y directo. El Valencia ficha a Zaza porque lo necesita para evitar la debacle deportiva que no quiero ni mencionar. Y en cuanto al precio, he de decir que hoy en día por 18 millones de euros fichas a muy pocos delanteros que sean internacionales con una selección como la de Italia porque entre los equipos chinos y los ingleses, el precio de la carne de futbolista está por las nubes. Bienvenido Simone.

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