A sus 43 años, Alberto las ha vivido de todos los colores. El punter de Aielo de Rugat es uno de los más veteranos del raspall, pero se mantiene entre los grandes, confrontando con pilotaris a los que dobla la edad. Este domingo (18:30 horas) en Bellreguard y junto a Guille y Ricardet, con la camiseta de Villanueva de Castellón, tratará de igualar la final contra Waldo y Sanchis (Montesa). No les queda otra ya que, después de la derrota del domingo pasado en Genovés, perder significaría decir adiós al título.

Y aunque todos los pronósticos hacen favorita a la pareja, Alberto cree en la victoria, que daría paso al desempate del día 31 en Alzira. ¿Cómo ganar? Corrigiendo fallos: "Tenemos que jugar mejor, aprovechar los quinces que tengamos a nuestro alcance. En Genovés cometimos errores por los nervios que trataremos de corregir en Bellreguard, y a ver qué pasa". Se refiere Alberto a puntos perdidos con 15-5 a su favor que supusieron dejar en bandeja la remontada a Waldo.

"Hacemos esos fallos y la partida pasa del 20-5 al 10-15, y nos cansamos", reconoce. Y al contrario de la opinión generalizada, cree que Bellreguard puede ser un recinto propicio para su equipo. Pero hay que sacarle partido. "Es un trinquet más noble, que se come menos las pelotas, y hay que jugar mejor al rebot y por arriba", dice el de Aielo.

En cuanto a sus deberes y los de Ricardet, Alberto cree que la misión principal es que el joven punter de Genovés juegue "el máximo de pelotas posibles", y que pase lo contrario con el punter rival, "quitársela a Sanchis para que no ahogue a Guille". Por último, Alberto remará para "buscarle la izquierda a Waldo, debajo de la escala". La pelota jugada por la pareja debe llegar desde el fondo, y no desde los números cercanos al propio tamborí. Es el manual para ganar en raspall, sin extravagancias. Así quiere Alberto dar la vuelta a la final.

"Yo no soy de los que tiran la toalla. Lo tenemos difícil, Waldo está jugando muy bien, igual que Sanchis. Pero nosotros, a pesar de los cambios, nos hemos acoplado bien y, si tenemos suerte y no nos agotamos, ganaremos", resume Alberto.

Waldo es siempre favorito

Para Alberto, "Waldo es siempre favorito". De esa forma le carga presión al de Oliva, que ha alcanzado un alto nivel después de entrar en la Copa tras dos meses sin jugar por lesión. Desde entonces, Waldo recuerda al pilotari que ganó 10 individuales y media docena de ediciones de la Lliga de raspall.

El palmarés de Alberto tampoco se queda atrás. La Copa es una competición nueva, pero en la Lliga, ha ganado cuatro ediciones: 1992, 2000, 2007 y 2008. En 2014 también llegó a la final, pero una desgraciada lesión le apartó de la partida definitiva. Un tercio del título fue suyo. El de Aielo alcanzó las finales de 2010, 2011 y 2012 sin éxito.