La Copa President de la Diputació de València conocerá este martes a su primer finalista una vez concluya la semifinal absoluta programada en el trinquet de Massamagrell que medirá al equipo de Vinalesa de Puchol II y Nacho contra el representativo de la ciudad de Valencia de Fageca, Raúl y Héctor II.
A priori es más que probable que las apuestas salgan favorables a la pareja pues sus dos componentes hace tiempo que gozan de un nivel superlativo, especialmente Puchol II. Tanto es así que los de Vinalesa certificaron su pase a las semifinales en la primera ronda de la pasada fase y han podido afrontar el segundo acto con total tranquilidad.
La trayectoria de Puchol II y Nacho ha sido tan espectacular como su rendimiento ya que la pareja solamente ha cedido una derrota, precisamente ante el equipo de Valencia. Eso sí, fue con el pase a la fase final conseguido. Esto no quiere decir que los de Vinalesa regalasen el triunfo pero la intensidad no fue la misma que en el resto de partidas disputadas.
El buen momento del equipo tiene en Puchol II a su gran nombre propio. El escaleter no cesa de crecer y de asombrar por su capacidad para dominar todas las facetas del juego y además goza de una condición física envidiable.
En los medios Nacho también merece una mención especial ya que el de Beniparrell está en su mejor momento como pilotari profesional. Una pegada demoledora así como la rápidez para desplazarse por el trinquet son sus principales bazas.
Los componentes del trío también pueden presumir de llegar pletóricos a la cita. El caso más evidente es el de Fageca, que bien podría ser considerado como el segundo mejor en su posición en la actualidad, solamente superado por Puchol II. El de Valencia está fuerte y rápido y además domina la vaqueta prácticamente a placer.
Delante, Raúl se ha erigido en el estilete del equipo porque puede y tiene personalidad para ello. El de Godelleta hace tiempo que pugna por ser el número uno en su sitio y con un poco más de regularidad es probable que llegue a conseguirlo.
Héctor II también es merecedor de loas puesto que el de Massamagrell tiene la virtud de entrar en juego cuando la ocasión lo requiere buen sea para neutralizar las acometidas rivales o para concretar el quinze cerca de la cuerda.
