José Luís López realizó una nueva oferta al propietario de Pelayo, Jaime Amorós para salvaguardar el futuro del trinquet, que sigue cerrado.

El mecenas de la pilota ha aumentado su propuesta a 664.000 euros, cifra aproximada de una tasación de 2009 que Amorós señalaba como adecuada para negociar. La compra se ejecutaría en tres o cuatro años, cuando las instituciones pudiesen afrontar esta actuación para que el recinto sea de titularidad pública. Así, si son las instituciones las que compran directamente al propietario, se evitaría pagar dos veces el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales Onerosas (ITP) y los gastos de notaría, que supondrían unos 70.000 euros adicionales.

Hasta entonces López se haría cargo del alquiler de 2.500 euros mensuales y asumiría el gasto del traspaso de la licencia de actividad (112.500 euros) y de la remodelación del recinto, calculada en unos 150.000 euros. «Eso sería mi aportación a la pilota y a la ciudad de Valencia», dice.

López espera ahora una respuesta. Y en caso de que ésta sea afirmativa, se reuniría con el Ayuntamiento de Valencia, Generalitat y Diputació, que han acordado crear un consorcio en el que también tendría cabida la Federació de Pilota, para que se pronunciasen al respecto. Hasta la fecha, las instituciones han apoyado en todo a López.

Tras hablar con López, Superdeporte se puso en contacto con Jaime Amorós para ponerle al tanto de la conversación y conocer su postura. El propietario se mostró sorprendido y a la vez receptivo. «Sabía de la última propuesta por el valor de la tasación de 2009. Pero tenía entendido que había una cláusula que reflejaba que al ejecutar la opción de compra a los cuatro años se restaría un cuarenta por ciento de lo abonado en el alquiler, es decir, 48.000 euros. Y por eso he rechazado la oferta. Eso de que no se restaría del precio final es nuevo para mí y desde luego cambiaría mucho mi predisposición a negociar. Naturalmente el señor López será el primero en conocer mi decisión, que será consensuada con mi familia, pero sí puedo adelantar que con este supuesto las posturas están ahora más próximas», decía el actual propietario.

Por otro lado, Amorós, como López, se mostraba agotado por cómo se están prolongando las negociaciones y por la exposición mediática y planteaba la posibilidad de finiquitar el asunto por la vía rápida. «Yo también estoy bastante cansado del tema y lo que querría es liquidar esto de inmediato. Y cuando digo de inmediato, si es vendiendo al contado, mejor».

Sin embargo, López prefiere que sea la Administración la que compre en su momento por lo anteriormente expuesto, aunque no se cierra en banda a esta otra posibilidad planteada por Amorós.