La nadadora valenciana Selina Moreno tratará de convertirse en la segunda mujer española en cruzar a nado el Canal de Menorca, una travesía que además del reto deportivo busca también recaudar fondos para la Asociación Española Contra el Cáncer.
A Selina Moreno le diagnosticaron un cáncer de mama en 2005 y tras superarlo después de año y medio de tratamientos, la nadadora superó el reto de cruzar el agosto pasado el Canal de la Mancha, la travesía de 32 kilómetros que une Francia y Gran Bretaña. Con este logro, se convirtió en la segunda española en lograrlo tras Montserrat Tresserras, que lo consiguió hace 50 años.
El Canal de Menorca, que une las islas de Menorca a Mallorca en el Mar Mediterráneo con una distancia entre ambas de 36 kilómetros en línea recta, sólo ha sido nadado por cinco personas.
De conseguir nadarlo, Selina Moreno sería la segunda española en realizarlo. Su predecesora también fue la catalana Tresserras que lo logró el 16 de julio de 1969 en 21 horas y 7 minutos.
Moreno ofreció hoy una rueda de prensa, en el Pabellón e informó que tiene previsto llevar a cabo la prueba el próximo mes de julio, aunque no concretó el día, ya que dependerá de las condiciones meteorológicas y las mareas, aunque pretende que sea por la noche, a partir de las 21 horas y, a partir del día 3.
La salida, según ha puntualizado, se hará desde Cap d'Artruit (Menorca) y la llegada será aproximadamente en Cap de Freu (Mallorca).
La temperatura del agua oscila entre los 22º y 23º en el mes de julio. La nadadora utilizará para la travesía a nado, gorro, gafas, bañador y vaselina. La travesía a nado, por primera vez en la historia, se ajustará así la normativa de la Federación Internacional de Natación (FINA). "Es una forma de dar más rigor a una prueba", apuntó. "Nadar en casa siempre es más gratificante, además la temperatura del agua es superior, pero también tiene inconvenientes: el viento de tramontana, las medusas, la deshidratación y las corrientes", explicó.
El objetivo deportivo de Selina pasa por mejorar el mejor tiempo conseguido por una mujer, el de la inglesa Dellys Beynon, que empleó 16 horas y 9 minutos el 18 de julio de 1971.
Además del reto deportivo, la travesía de este año tiene un fin solidario y se ha abierto un número de cuenta para recaudar fondos para la investigación de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC).
Selina Moreno señaló que empezó a nadar la larga distancia después de superar el cáncer de mama. "Quizá antes, la larga distancia, podía verla como una muralla, como algo inalcanzable, pero cuando superas enfermedades como ésta, desmitificas lo que antes considerabas retos insuperables", confesó.
Selina recuerda que la natación le permitió recuperar la movilidad en los brazos tras la intervención quirúrgica, además de ayudarle psicológicamente en su rehabilitación. "Tras la enfermedad me he hecho más fuerte", recalcó.
Selina Moreno nada desde el mes de enero en mar abierto, además de dedicar entre cuatro y cinco horas diarias para prepararse para la prueba, y realizar entrenamientos de diez horas seguidas sin salir de una piscina o de ocho en mar abierto. "Además de estar bien físicamente, la larga distancia se nada con la cabeza, por eso tengo que preparar tanto la parte psicológica como la física", concluyó.
