El español Rafael Nadal, número uno del mundo, que hoy logró por primera vez su clasificación para la final del Abierto de Estados Unidos, afirmó que está muy satisfecho con su rendimiento durante el torneo, pero indicó que ahora afronta el partido más difícil.

"La victoria de hoy es muy importante porque me permite estar en la final del último Grand Slam, al que siempre había llegado con problemas. He hecho un gran torneo hasta ahora y estoy muy satisfecho, además, de haber ganado todos los partidos en tres sets, pero ahora falta el partido más difícil que es siempre la final", indicó.

En el caso de ganar en Nueva York, Nadal entraría en el selecto grupo de tenistas que han ganado todos los torneos del Grand Slam, aunque el español aseguró que no cree que esté camino de convertirse en el mejor jugador de todos los tiempos. Aseguró que ése es Roger Federer.

"No creo que llegue al nivel de Roger, con dieciséis títulos de Grand Slam y 24 semifinales seguidas. Lo que ha logrado él es imposible de repetir. En mi opinión es el mejor de la historia. De Rod Laver no puedo hablar porque no estaba en este mundo", señaló entre risas.

"No creo que sea tan importante jugar la final con Federer. Sería importante porque es una final, pero los dos ya hemos jugado partidos muy importantes en nuestras carreras, aunque éste sería un nuevo duelo porque no habíamos jugado aquí antes. Está jugando a su mejor nivel este año y será difícil si está en la final", explicó.

Cuestionado por si finalmente fuera Djokovic su rival, comentó: "Cuando está bien está al nivel más alto porque te puede hacer un 'winner' desde cualquier parte de la pista. Para mí sería también difícil porque tengo muchas derrotas con él en esta superficie".

Tras las malas sensaciones con las que acabó la pasada temporada, el tenista mallorquín indicó que la clave para los buenos resultados en la actual fue ganar en Montecarlo porque, a pesar de jugar muy bien a principio de año, le faltaba la confianza que dan los títulos.

Por último, Nadal se refirió a las palabras de apoyo, a pie de pista al acabar el partido, que dirigió a los familiares de las víctimas de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.

"Lo mínimo que podía hacer era tener este recuerdo para ellos. El 11-S fue un shock y los últimos seis años siempre he visitado la 'Zona Cero'. La imagen más impactante de mi vida fue ver el choque. Todo el mundo recuerda dónde estaba cuando sucedió. Yo estaba en Madrid buscando en un 'Future' mi primer punto ATP, que no conseguí", concluyó.