Después de un mes apartado de los trinquetes por una dolencia en el hombro, Miguel reapareció el sábado en el trinquet de Petrer donde en compañía de Tato se enfrentó a Francés y Santi, a los que superó por 60 a 40.

La partida era una prueba de fuego para conocer en qué momento de su recuperación se encuentra el pelotari. Y según el propio pelotari, el resultado fue satisfactorio a medias ya que pudo completar el envite aunque todavía no se puede descargar por arriba. Y el juego de aire es una de las principales armas del escaleter de Petrer. «Estoy contento porque pude terminar la partida y porque por abajo puedo desenvolverme sin problemas. La pega está en los golpeos por arriba ya que todavía no me puedo descargar y me tengo que limitar a acompañar la pelota», explica el pelotari. Otro dato para estar contentos es que Miguel amaneció ayer sin dolores pese al esfuerzo realizado y la falta de rodaje. «Tenía agujetas pero eso es algo normal debido a la inactividad», comenta Miguel.

Miguel dispondrá ahora de un mínimo de dos semanas antes del inicio del Circuit Bancaixa, en el que jugará formando una de los dos parejas participantes, en su caso junto a Félix. El de Petrer cree que no llegará pletórico a la cita pero confía en que su rendimiento sea óptimo. «La idea es trabajar durante estas semanas para llegar bien al Circuit Bancaixa. No creo que me dé tiempo para comenzar al nivel de antes de la lesión pero espero estar en un momento aceptable y en pocas jornadas recuperar las prestaciones de antes. Ahora hay que completar partidas y padecer porque es así como se adquiere el ritmo de competición», concluye.