Valencia contará a partir de 2015 con una pista de tierra de 5 kilómetros y 2,60 metros de ancho que recorrerá el viejo cauce del río Turia desde el puente Nou d´Octubre al puente del Angel Custodio, justo antes del Gullliver. Un circuito que ordenará a los miles y miles de corredores que usan los jardines para disfrutar de su afición o para preparar alguna de las cientos de carreras que pueblan el calendario de la Comunitat Valenciana.

Este nuevo itinerario, que llevará el nombre de ´Circuit 5K Jardí del Turia´, supone todo un regalo para la ciudad, tanto para sus habitantes como para los turistas que la visitan. De hecho, nace bajo el paraguas del proyecto ´Valencia ciudad del running´ presentado el pasado enero y que engloba las 28 pruebas populares que se celebran por sus calles y jardines, así como su promoción local, nacional e internacional.

La Fundación Trinidad Alfonso que preside Juan Roig invertirá dos millones de euros en su construcción y correrá además con los gastos de mantenimiento durante diez años. Así lo explicó su directora, Elena Tejedor: «El circuito servirá para ordenar a los usuarios del río que corren y para aquellos que quieren iniciarse. El coste es de dos millones de euros y la Fundación Trinidad Alfonso se compromete a su mantenimiento durante un periodo de diez años».

Tejedor anunció asimismo que «las obras se iniciarán después del verano, por fases, y se espera que duren entre nueve y doce meses» y destacó que «el circuito contará con luz y paneles lumínicos en cuyo diseño se ha involucrado el Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV)».

El concejal de deportes del Ayuntamiento de Valencia, Cristóbal Grau, agradeció en la presentación del circuito la implicación de la Fundación Trinidad Alfonso en el proyecto ´Valencia ciudad del running´ y en iniciativas como esta, «buena muestra de la colaboración pública y privada».

Por su parte, Carlos Campos, el arquitecto que ha dirigido el proyecto, comentó que se ha intentado «hacer un recorrido atractivo adaptando el trazado a las condiciones del cauce sin distorsionar el jardín y restaurando puntos deteriorados». En este sentido, apuntó que es un «circuito de 5,7 km contando los bucles, algo sinuoso para respetar el arbolado y pasar cerca de las fuentes». Dentro del apartado técnico señaló que «dispondrá de un pavimento de tierra estabilizada con ligante para evitar charcos y vegetación, así como señalización e iluminación», características que según él «lo hacen único» en comparación con otras ciudades, a la vez que facilitan su uso en horario nocturno.

También tuvo palabras de elogio hacia el circuito la responsable de parques, jardines y playas del Ayuntamiento, Lourdes Bernal. «Aporta un valor añadido al que es sin duda uno de los parques más visitados de España», dijo antes de animar a sus promotores a estudiar su posible continuación hacia las playas, donde Valencia cuenta con 19,9 km de litoral.

El cauce del Turia ha sido desde siempre una de las rutas preferidas de los corredores de Valencia incluso antes de que se ordenara como jardín en sus once tramos actuales. Muchos veteranos se conocen de memoria la distancia entre sus puentes, y hace años hasta se llegó a balizar todo su recorrido. Sin embargo, el gamberrismo y el paso del tiempo ha hecho desaparecer la mayoría de puntos kilómetricos, y los que quedan sirven de poca ayuda para aquellos que gustan de entrenar metódicamente.

Ahora, en plena era de los GPS y con móviles de última generación con múltiples aplicaciones para corredores, el ´Circuit 5K Jardí del Turia´ viene a facilitar las cosas a aquellos que pretenden iniciarse así como a los más tradicionales y reacios a correr con ese tipo de ´gadgets´ por motivos económicos o por puro romanticismo. Además, al tratarse de un circuito lineal que cruza Valencia de este a oeste, permite el fácil acceso desde cualquier punto de la ciudad. Y es que quien no corre es porque no quiere.