Las Guerreras ya están en casa. El viaje de vuelta con la plata lograda en el Europeo de Hungría y Croacia se hizo más largo de los esperado, con media hora de retraso según la hora prevista de aterrizaje, la selección española de balonmano con las valencianas Silvia Navarro y Lara González pisó suelo español, aunque se hicieron de rogar cuarenta y cinco minutos más en salir por la terminal dos del aeropuerto madrileño donde les esperaban aficionados medios de comunicación para darles el recibimiento que se merecen. Las Guerreras pudieron comprobar el revuelo mediático creado por su hazaña, con una veintena de medios cubriendo su llegada en el aeropuerto y más de cien personas esperando pacientemente para aplaudir a las españolas.

Marta Mangué, capitana y única jugadora que ha marcado más de novecientos goles con la selección, confesó estar abrumada por el cálido y emotivo recibimiento que tuvieron en el aeropuerto de Madrid Barajas-Adolfo Suárez: «Llevo quince años en la selección y es duro ver que no venía nadie al aeropuerto a recibirnos. Comparándolo con esto es abrumador. Estoy impresionada y hay que agradecérselo a todo el mundo, porque las 'Guerreras' estamos muy contentas». La capitana cree que el grupo que forma la selección es capaz de lograr todo lo que se proponga. «Tengo la sensación de que España puede hacer todo y conseguir lo máximo. En este Europeo hemos puesto en momentos muy difíciles a Noruega, que es la actual campeona, y todos los equipos nos temen por nuestra defensa y nuestro juego diferente. Estoy súper contenta de haber formado parte de la selección porque somos un grupo que sorprende en todos los momentos», dijo . Eso sí, la veterana jugadora del Fleury francés confesó que les faltó, «un poco de gasolina» para contrarrestar la frescura de sus rivales en la final del Europeo.

También habló la otra capitana de equipo, Macarena Aguilar, quien consideró que en frío, la plata tiene más valor. «Fríamente se valora mucho más esta plata. Tras la final estábamos dolidas por que el equipo estaba confiado en que podía ganar, por las sensaciones, por el juego y por todo», dijo Aguilar. «Este campeonato no fue como el de Macedonia en 2008, cuando llegamos a la final por sorpresa. Esta vez fueron otras sensaciones y por eso lo pasamos mal después del partido, pero ahora toca disfrutar porque una plata no se consigue todos los años», confesó una de las jugadoras más veteranas. «El lado positivo es que los Juegos Olímpicos de Brasil están mucho más cerca, que también era nuestro objetivo», comentó la jugadora del Gyori.

«Cuando nos fuimos hace quince días íbamos cargados de ilusión y ahora venimos cargados de una plata. Era una ambición ir a por la medalla, había dificultades, pero el grupo ha demostrado sus características», dijo el seleccionado Jorge Dueñas a su llegada al aeropuerto de Madrid Barajas-Adolfo Suárez.