Alejandra Quereda capitaneará al equipo español de gimnasia rítmica en los Juegos de RíoAlejandra Quereda gimnasia rítmicaJuegos de Río. La alicantina, a sus 24 años afronta con toda la ilusión del mundo los que serán sus segundos Juegos Olímpicos: «estos Juegos los afrontamos de forma distinta. A Londres íbamos a vivir nuestra primera experiencia olímpica, además no habíamos logrado todas las medallas internacionales que hemos acumulado en este ciclo olímpico. Por eso ahora las expectativas son más altas. Nosotras vamos a Río a hacer lo mejor posible nuestros ejercicios y a competir contra nosotras mismas. Más que fijarnos en los rivales, tenemos que pensar en nosotras».

Para Alejandra la clave será controlar los nervios: «nuestro deporte tiene una presión extra, ya que el ejercicio dura 2 minutos y medio pero si cometes un fallo, por muy bien que hagas el resto ya no sirve, el fallo ya no puedes arreglarlo. Por eso hay que estar muy preparadas psicológicamente». Para que todo salga perfecto en Río, la clave es el trabajo: «nosotras entrenamos cada día como si nos estuviésemos jugando la medalla. Entrenamos unas 7 horas diarias. Se trata de repetir, repetir y repetir el ejercicio hasta que lo hagamos de manera mecánica, sin fallos».

Hasta llegar a los Juegos, Alejandra y sus compañeras se han sometido a un intenso calendario de entrenamiento y competición: «Desde que empezamos la temporada no hemos parado, hemos tenido continuas competiciones: Copa del Mundo, torneos internacionales, amistosos, Europeo...está siendo un año muy intenso».

Alejandra capitanea un equipo muy sólido: «llevamos tiempo juntas, somos un equipo veterano y nos compenetramos perfectamente».

España competirá con dos ejercicios nuevos de este año que de momento, están dando muy buenos resultados: «Desde que los estrenamos en febrero nos ha ido muy bien. Por un lado llevamos un ejercicio muy nuestro, muy flamenco, conservando nuestro carácter y tradición, en el que nos ha ayudado Rafael Amargo, y por otro hemos querido rendir un homenaje a la ciudad anfitriona, Río, llevando un ejercicio de cintas a ritmo de samba en el que nos ha ayudado también una coreógrafa brasileña. Queremos demostrar que somos capaces de interpretar ritmos muy distintos».

Alejandra Quereda ha sido una de las máximas exponentes de una generación de oro de la gimnasia rítmicaAlejandra Quereda: «cada vez se nos sigue más, se reconoce nuestros éxitos pero aún queda un camino por recorrer. Lo nuestro es un trabajo continuo y una dedicación exclusiva a este deporte. Estamos cumpliendo muchos sueños y cada vez la gente se interesa más por nosotras».

Desde muy pequeña Alejandra supo que lo suyo era la gimnasia rítmica: «Mi madre fue gimnasta, varias veces campeona de España, pero eso no ha tenido nada que ver. De hecho me apuntó a ballet pero fui yo la que le pedí hacer gimnasia. Empecé en el colegio Jesús María precisamente con la entrenadora que había tenido mi madre y desde el principio me entusiasmó este deporte. Nunca tenía bastante. Cuando acababa el entrenamiento yo seguía por mi cuenta, me fijaba en lo que hacían las más mayores y las imitaba. En vacaciones seguía entrenando, desde siempre he sentido pasión por este deporte». Pese a ello, Alejandra fue capaz de decir ´no´ al equipo español: «Con 12 años me convocaron para el Campeonato de España júnior. Mis padres y yo decidimos que no era el momento de dar ese paso y decidí seguir en casa, entrenando en mi club. Mi objetivo no era llegar a unos Juegos, sólo disfrutar de la gimnasia». Pero 4 años más tarde, se le volvía a brindar una nueva oportunidad : «Con 16 años sí me vi preparada ya para irme a Madrid y en ese momento cambié el chip. Ya estaba en el equipo nacional y entonces sí empecé a soñar con los Juegos Olímpicos».

Desde 2008 el Centro de Alto Rendimiento de Madrid ha sido la casa de la gimnasta alicantina: «es sacrificado porque estoy lejos de Alicante pero muy bonito porque estoy consiguiendo cosas muy importantes. Nunca imaginé lograr una medalla en un campeonato del Mundo, un Europeo... El ambiente en el CAR es muy bueno, tengo grandes amigos». La rítmica es la gran baza de la gimnasia española ya que España no ha logrado clasificarse en artística: «es duro ver a compañeros que han trabajado mucho y que no han logrado la clasificación».

En todo este tiempo, Alejandra Quereda siempre ha tenido el apoyo de su familia: «para mí es algo muy importante. Ellos también han hecho un gran sacrificio, no es fácil que una hija se vaya fuera con 16 años, hay momentos duros pero siempre han estado ahí. Vienen mucho a verme a Madrid, me han acompañado a todos los grandes campeonatos, y por supuesto también estarán en Río».

A Alejandra y sus compañeras les tocará competir el último día de los Juegos, el de la clausura: «la rítmica siempre es al final, los últimos días, en Londres también fue así. No es algo que me preocupe. Iremos a Río la segunda semana de agosto y esperaremos con ilusión el momento de debutar».

La gimnasta alicantina además de dedicar buena parte del día a entrenar, también estudia medicina: «no es fácil compaginar las dos cosas pero intento dar lo mejor de mí misma siempre».