El atleta paralímpico Javi Conde y su compañero Jon Salvador completaron este viernes un maratón solidario que se desarrolló íntegramente en el interior de la cueva vizcaína de Pozalagua.
El ganador de siete medallas de oro y dos de plata en cinco juegos Paralímpicos y el vencedor de maratones como del Sahara realizaron el recorrido sobre una pasarela bajo tierra en el interior de esta cueva ubicada en el municipio de Karrantza en un tiempo de cinco horas, trece minutos y un segundo.
Conde y Salvador destacaron, en declaraciones a Efe, la extrema dureza física y mental de la prueba, dado el gran número de giros que han tenido que realizar, lo que les ha causado dolores en distintas partes del cuerpo que paliaron aplicándose con frecuencia antiinflamatorios durante la carrera en el cuello, las inglés y los pies, principalmente.
El atleta paralímpico señaló que el tiempo realizado fue mejor del previsto, ya que habían calculado que finalizarían la prueba en unas seis horas.
Con una temperatura de 13 grados y una humedad del cien por cien, Conde y Salvador corrieron los 42 kilómetros y 195 metros del maratón protegidos con cascos de las estalactitas excéntricas de la cueva a lo largo de la pasarela de 61 metros sobre la que se desarrolló la prueba, enmoquetada para la ocasión, que recorrieron un total de 686 veces.
Gran parte de la dificultad del reto estaba en que en cada recorrido de la pasarela había que realizar ocho giros diferentes de 90, 180 y 360 grados, lo que castigó las articulaciones de los dos atletas, según indicó Salvador, ertzaina de profesión.
Estos dos atletas superaron anteriormente juntos otros retos, como correr maratones en el Puente de Vizcaya, en la gabarra que usó la plantilla del Athletic campeón de Liga de principios de los ochenta o dentro del sifón de Deusto, a 32,5 metros de profundidad por debajo de la ría de Bilbao, pero ninguno de ellos tan duro como el de este viernes en la cueva de Pozalagua, aseguró Javi Conde.
Tras completar el recorrido, los dos atletas se dirigieron al Balneario de Karrantza, donde pasarán la noche y este sábado recibirán un tratamiento de recuperación.
Los 8.000 euros recaudados de varios patrocinadores se destinarán a distintos proyectos sociales de varias ONG.
La cueva de Pozalagua, a 52 kilómetros de Bilbao y limítrofe con Cantabria, se encuentra en las peñas de Ranedo, dentro del parque natural de Armañón.
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