El golfista castellonense Sergio García vivió este martes una curiosa circunstancia cuando dio su conferencia de prensa como campeón del Masters de Augusta desde un hospital de Austin, Texas, después de que su mujer, Angela Atkins, tuviese que ser ingresada por su próxima maternidad.

"Ha sido una mañana ajetreada. Hará hora u hora y media, Angela ha roto aguas y estamos ahora mismo en el hospital", señaló García en la conferencia videotelefónica desde el propio centro donde ingresó su esposa.

El de Borriol reconoció que es un "sentimiento diferente" el de ser padre por primera vez que al de ganar un 'major' por primera vez, como le sucedió el año pasado en Augusta Augusta y que estaba "un poco emocionado y nervioso porque todo vaya bien".

Además, aclaró que nada ha cambiado en exceso desde que se enfundase la chaqueta verde. "Siempre me dicen que esto cambia la vida, pero no lo siento así y sigo haciendo las mismas cosas, todavía soy el mismo tipo. No creo que haya cambiado en ese aspecto", puntualizó.

"Soy afortunado de tener una maravillosa carrera, una maravillosa vida y que ahora es incluso mejor con una victoria en Augusta, un matrimonio con mi mejor amiga y una maravillosa mujer y ahora a punto de tener nuestro primer hijo. Hemos disfrutado cada minuto y no podemos esperar a lo que nos trae el futuro", añadió.