Tarde redonda este sábado en el Pabellón Municipal de Peñíscola. El equipo local, el Peñíscola RehabMedic, se ha llevado el triunfo en el derbi valenciano ante el Levante UD FS, por la mínima (1-0), lo que a su vez le ha servido para sentenciar de forma matemática su permanencia en Primera División. El equipo castellonense se ha aprovechado de la derrota el viernes del Santiago Futsal frente al Barça, ya que sabía que con un triunfo aseguraba la permanencia y lo ha dado todo por conseguirla delante de su afición. El Levante, con la derrota, dice adiós definitivamente a sus posibilidades de meterse en los ‘Playoffs’ por el título, para lo que necesitaba ganar y esperar una victoria del Ríos Renovables Zaragoza; y ninguna de las dos cosas ha sucedido.

El derbi ha arrancado con precauciones. Ambos equipos se estudiaban y no querían cometer fallos en la salida de balón. Ahí ha salido el temperamento de los locales, que dominaban el esférico y el tempo del encuentro, todo a través de la posesión. Pero con resultado negativo en las ocasiones, ya que no conseguía materializar el dominio con llegadas claras. Eso ha llevado a despertar al Levante UD FS, que ha empezado a acercarse poco a poco al área peñiscolana. Se veía que ambos equipos se respetaban, por lo que prácticamente en la primera mitad no ha habido apenas ocasiones de gol.

La segunda mitad ha sido otro cantar. Se ha venido arriba el Municipal, lleno como en las mejores ocasiones. Los jugadores locales querían y la afición empujaba. Así, han ido llegando las ocasiones, una tras otra, pero el guardameta Prieto se convertía en un muro infranqueable. No ha desistido Levante, que ponía la directa en las contras, haciendo trabajar de lo lindo a Molina.

Era cuestión de acertar cara a gol para los dos, y ahí ha decidido el punto fatídico. Esteban ha regateado dentro del área y Sena le ha trabado. Penalti. Terry ha sido quién ha asumido la responsabilidad y no ha fallado, llevando el delirio a la grada. Se adelantaba el Peñíscola y no iba a dejar escapar su ventaja fácilmente, defendida con uñas y dientes. Aún así, ha habido ocasiones por doquier. El Levante UD FS se la ha jugado con portero jugador, pero ya era tarde y la fiesta se ha desatado en las gradas con el pitido final del árbitro y con la confirmación de la permanencia entre los mejores.