La pelea entre Khabib Nurmagomedov y Conor McGregor va a seguir dando de qué hablar durante meses. Sobre todo, desgraciadamente, por lo ocurrido nada más terminar el combate, con el vencedor, el luchador ruso, saltando fuera del octógono e intentando agredir al equipo de McGregor, a la vez que miembros de su propio equipo saltaban dentro del octógono a agredir al luchador irlandés.
Esta reacción desmedida le va a costar cara a Khabib. La Comisión Deportiva del Estado de Nevada ya está estudiando el caso, hasta el punto de que se le han retenido las ganancias económicas que había obtenido con la pelea; y la propia UFC también estudia sancionarle, aunque en su caso más de cara a la galería que otra cosa.
Sin embargo, el castigo más grande que le va a llegar a Khabib parece que va a ser de alguien muy cercano a él. Concretamente, su padre, Abdulmanap Nurmagomedov, que a su vez es su entrenador. Abdulmanap, que no pudo estar en la pelea por no tener visado para acceder a Estados Unidos, hizo unas duras declaraciones contra el comportamiento de su hijo en la prensa rusa.
"Creo que, para Khabib, el mayor castigo va a llegar por mi parte. Voy a tomarme este asunto muy en serio. Le advertí. Para mí, lo más importante es la disciplina. Puedes hacer lo que te dé la gana en el octógono, pero fuera de él, es la frontera que separa a los civiles. Hay niños, mujeres, espectadores. La pelea tuvo lugar dentro del octógono. Ese es el espectáculo. Pero estoy categóricamente en contra de pelear fuera del octógono. Ahí es donde tiene que coexistir pacíficamente. Pelea dentro del octógono", dijo Abdulmanap Nurmagomedov, padre de Khabib.
Un Khabib que, por otra parte, ya sabía lo que se le venía encima cuando, en la rueda de prensa posterior a la pelea, dijo estas palabras: "Sé que mi padre me va a hacer polvo cuando llegue a casa. Sé que me va a hacer polvo".
