La ministra de Cultura y Deporte israelí, Miri Reguev, solicitó a su homólogo español, José Guirao, que interceda en el partido de waterpolo femenino entre Israel y España, que debería disputarse este martes y ha sido sujeto de una campaña de boicot, informó en comunicado.

"Los movimientos BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones) son claramente antisemitas en su naturaleza y operan para dañar al Estado de Israel y a sus ciudadanos", escribió Reguev a Guirao.

Y añadió: "Espero que se ocupe de ello, que la municipalidad de Molins de Rei actúe de acuerdo con el reglamento olímpico internacional y permita que todos los deportistas compitan como iguales en los partidos".

Reguev pide a su homólogo que se asegure de que el partido "se celebre con el plan original" y que se impida que los movimientos que promueven el boicot "molesten los procedimientos de la competición y se garantice la seguridad de los deportistas israelíes".

El partido, que forma parte del campeonato Europeo preliminar de la Liga Mundial femenina de waterpolo, había sido programado en la localidad barcelonesa de Molins de Rei, pero tras la campaña de boicot del grupo de apoyo catalán al movimiento BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones) y de la CUP-Capgirem, se trasladó a la piscina Sant Jordi de Barcelona y se determinó que se celebraría sin asistencia de público.

Sin embargo, la CUP también protestó esta nueva ubicación y el anuncio de una concentración del BDS bajo el lema "No eres bienvenido", refiriéndose al equipo de waterpolo israelí, hizo que se desaconsejara la disputa del encuentro en Barcelona.

Ante esta posibilidad, la Real Federación Española de Natación (RFEN) baraja la opción de que el partido se dispute en la piscina del Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Sant Cugat, aunque fuentes de la RFEN confirmaron ayer a Efe que la decisión final la tomarán los responsables de seguridad.

Revital Cohen Gluska, presidenta de la Asociación de Waterpolo israelí, dijo al Canal 10 de noticias que la embajada de Israel en España le comunicó que el juego quedaba cancelado, citó el Times of Israel.

"Al principio pensé que era algo interno de ellos, pero luego, cuando me contactó la embajada israelí en España, me dijeron que el ayuntamiento había cedido a la presión del BDS", afirmó.

"Espero que no nos muevan a una piscina de entrenamiento. No nos asusta un público hostil. Hemos venido a hacer deporte, no política", añadió.

Cohen dijo que el presidente del Comité Olímpico, Alejandro Blanco Bravo, les había llamado para disculparse y que el alcalde de Molins del Rei también había tuiteado un perdón por los inconvenientes.

El equipo sigue sin saber dónde será el partido ni si tendrá lugar, según informó la radio nacional Kan.