Llegó a un Levante UD FS que coqueteaba con el descenso y tras salvar y consolidar al equipo en Primera, David Madrid disfruta de un año en el que van quintos de la Liga y en el que han logrado récord de puntos en la primera vuelta. Pero si algo ilusiona especialmente al técnico es una Copa de España que se juega en Valencia y en la que se ve con opciones.

—El equipo ha terminado 2018 quinto y consolidado entre los mejores de la Liga. ¿Qué nota le pone al año del Levante UD FS

—Para mí ha sido un año excelente porque hemos terminado quintos, pero también clasificados para la Copa por méritos propios y no solo por ser el equipo anfitrión y ese es un éxito que no había conseguido nunca el Levante. Debemos de estar muy contentos, pero sin conformarnos solo con esto para seguir mejorando el próximo año.

—¿Cuál es el secreto de este Levante UD FS?

—El secreto es la unión que hay en la plantilla, el buen vestuario que hay, la unión entre el cuerpo técnico y los jugadores. Somos un equipo que cree, que confía y que trabaja al máximo en cada minuto de cada sesión. Hay mucha unión y trabajo.

—En verano hubo siete fichajes. ¿Esperaba que se fuera a ver un rendimiento tan alto en tan poco tiempo y con tantas caras nuevas?

—Sabía que iba a costar como pasó en la primeras jornadas porque era un cambio radical, un cambio de muchos jugadores en todas las posiciones. Hubo un poco de nerviosismo en algunas partes porque no salían los resultados como esperábamos, pero confiaba al 100% de que podríamos conseguir este éxito por cómo les vi trabajar en pretemporada.

—¿Qué es lo que más ha cambiado de la temporada pasada a la actual?

—Competir al máximo cada balón. Competimos como si cada balón fuera el último, tenemos un equipo mucho más competitivo y mucho más empaque.

—Siempre dice que la afición es clave y ayuda al equipo, pero por lo visto este año y por el estilo de juego, ayudan pero también disfrutan. ¿Lo notan?

—La afición para mí es importantísima. El año que llegué en el que conseguimos salvar al equipo, gran parte del mérito fue de la afición, encabezada por los 'Levante Fans' y la 'Peña Sin Tregua', que siempre están ahí en las buenas y en las malas. Les debemos más nosotros a ellos que ellos a nosotros.

—El año pasado lograron la permanencia y ahora, viendo cómo va la temporada, ¿se puede poner un objetivo más ambicioso?

—Un objetivo muy ambicioso pensando que estamos en la mejor Liga del mundo era el de entrar en la Copa e intentar darle una alegría a nuestra afición en la Copa al ser en casa. Después, intentaremos entrar en el playoff y que la afición disfrute de unos partidos muy bonitos y diferentes a los de la Liga.

—Los presupuestos son muy distintos, pero se ha ganado a algunos equipos grandes y se ha puesto en apuros a otros. ¿Se pueden pelear los títulos con ellos?

—Los títulos no sé, pero tenemos que ser inconformistas, no tenemos que pensar que el Barça o cualquier otro grande es mejor que nosotros, sino que debemos ponerle pasión, trabajo y corazón, en eso no pueden ganarnos. Ganamos al Inter Movistar y hemos perdido con otros grandes de arriba y eso debe enseñarnos que podemos ganarles.

—¿Refuerza mucho la autoestima al equipo el hecho de haberse clasificado por méritos propios para la Copa al margen de estar ya clasificado por ser anfitrión?

—Sí porque al principio lo pasamos mal. Fue una presión muy grande, las redes sociales nos hicieron mucho daño, hubo opiniones que nos hicieron mucho daño al decir que nos habían regalado la Copa y era una presión excesiva. Ahora al clasificarnos y de esa forma tan rotunda nos refuerza para el trabajo diario y para la filosofía que tenemos.

—Imagino que aunque van partido a partido, es imposible no pensar siempre en esta Copa de València siendo los anfitriones...

—Sí, pero con la ayuda de los capitanes nos hemos intentado quitar un poco esto de la cabeza, para pensar más en cada partido e ir mejorando. Pero nos dolió mucho que nos criticaran por supuestamente habernos regalado la Copa y eso lo teníamos muy presente a la hora de trabajar.

—En el sorteo de la Copa no tuvieron demasiado suerte al emparejarse con el líder de la Liga

—Sí, pero yo también estoy convencido, conociendo a Diego, que él también está preocupado y ocupado en intentar contrarrestarnos porque no va a ser nada fácil. Pero es cierto que no hemos tenido mucha suerte y nos podía haber tocado un sorteo un poco más fácil. Pero si queremos conseguir algo bonito y tener alegrías, tenemos que competir de tú a tú y seguir nuestra filosofía. Ya solo llegar a la final con los cruces que tenemos sería algo épico y muy bonito, para acordarse muchos año, así que imagina si conseguimos la Copa.

—De todas formas en una competición tan corta las sorpresas son posibles y se ha visto en los últimos años con los títulos del Jaén...

—Sí, he jugado muchas y algunas de anfitrión, también he jugado contra el anfitrión y le hemos eliminado y cualquiera la puede ganar. En una Copa hay muchas variables, depende de cómo queda cada equipo a ese momento porque aún queda mucha competición, hay que ver con qué presión llegas. Habiendo mercado de por medio en el que los clubes pueden fichar jugadores, queda mucho, pero lo que está claro es que la Copa de España es lo más bonito que hay después de un Mundial y siempre hay sorpresas.

—Sería esta Copa el principal deseo deportivo que le pediría al nuevo año?

—Sí porque entre la Liga y la Copa prefiero la Copa porque para mí es la corona, es una competición en la que hay más sorpresas porque en la Liga, ganar a un Barça o a un Inter Movistar a cinco partidos es muy difícil aunque nada es imposible. Al nuevo año le pediría ganar la Copa en casa.

—¿Le puede dar un plus al equipo el hecho de jugar en un pabellón tan grande como La Fonteta al poder tener más apoyo que en Paterna?

—Sí porque estoy convencido de que la afición del Levante, la afición de València y de todo el fútbol sala van a apoyar al club, después de 17 años van a volver a la Fonteta a animar al Levante como en su día hicieron el Vijusa y eso es un plus. Si ya lo teníamos en el Cabanyal y más aún en Paterna al ser un poquito más grande, estoy convencido de que nos ayudará mucho jugar en la Fonteta.

—¿Recuerda algo de aquella victoria histórica del Vijusa hace 17 años?

—Sí, yo estaba ya metido en el fútbol sala y vi la victoria de aquel Vijusa. He hablado sobre ella con algunos jugadores, el fisio que está conmigo, Luis, estaba de fisio en el Vijusa Valencia. Recuerdo muy bien aquella Copa y cómo apoyó la afición al equipo hasta llegar a ser campeón.

—Al margen de la Copa, ¿cómo valora el hecho de que el club apostara por usted ofreciéndole un contrato de renovación de tres temporadas?

—Llegué para cinco o seis meses. me llamaron porque el equipo estaba muy mal, en zona de descenso, y valoro mucho tanto personal como profesionalmente, por la forma en la que se produjo por parte de Manolo Bueno y Quico catalán, y estoy muy contento y por eso decidí quedarme.

—¿Era imaginable que acabaría logrando la permanencia y que el equipo llegara al nivel actual en tan poco tiempo?

—Cuando me llamó Manolo Bueno estaba convencido de que lo salvaba y por eso acepté el reto y dejé otro proyecto que tenía. Por la plantilla que había y por tratarse de un club tan serio como el Levante, acepté pensando solo en ese objetivo de la salvación. Ahora, si entonces me dijeran que poco tiempo después iba a batir el récord de puntos, entrar en la Copa de España e ir quintos en la Liga, no me lo habría creído. En esa época no lo podía pensar porque el club aún estaba muy en pañales.

—¿Cómo se encuentra el equipo en Paterna? Y ya no solo por la afición sino por la pista, el parqué, el juego que se puede hacer allí...?

—Es espectacular. Ha sido un cambio muy bueno, un poco doloroso al principio para los aficionados y porque salíamos de València, pero el parqué, las instalaciones, los operarios, el Ayuntamiento de Paterna, todo es bueno para nosotros. Nos sentimos como reyes, nos tratan como si fuéramos unos privilegiados, la pista es espectacular, es uno de los mejores parqués que hay en la Liga y recibimos un trato muy bueno. También hay comodidad para el espectador, que llega, aparca y en un minuto está en el pabellón y en El Cabanyal era imposible.