Maite Zugarrondo, portera del Bera Bera, que aspira a un nuevo título de Liga este fin de semana con permiso del Rocasa Gran Canaria de Silvia Navarro, deja el balonmano de élite por no poder conciliar.

Así lo aseguró en una rueda de prensa debido a tener " acogida a dos sobrinas pequeñas, lo que hace muy difícil conciliar mi vida de madre soltera con el balonmano a este nivel".

Con un palmarés en el que brillan cuatro Copas de la Reina y cuatro Ligas, la jugadora justificó su retirada entre lágrimas en una rueda de prensa. "Voy a buscar un futuro y una estabilidad para ellas en Pamplona, que creo que es lo mejor".

Todo un llamamiento por la conciliación en una División de Honor femenina ya bastante castigada en los últimos años con la merma de patrocinios y la fuga de jugadoras al extranjero.