La selección española de rugby 7 cierra este fin de semana las Series Mundiales, cuya décima y última etapa se celebra en París, con la tranquilidad de haber asegurado la permanencia desde mediada la campaña y el propósito de preparar el complicado torneo preolímpico de mediados de julio.

Pablo Feijóo, el seleccionador nacional, le ha dado así continuidad al plantel que cosechó la última plaza la semana pasada en Londres, con el doble objetivo de preservar a algunos de sus jugadores más importantes y de foguear a jóvenes prometedores procedentes de las categorías inferiores.

Se producirá de este modo el debut en las Series Mundiales de Fran Osete, un centro todavía en edad júnior del Tecnidex Valencia, que constituye el trío de novedades en esta convocatoria junto al veterano Matías Tudela y a Juan Martínez Lucas, quienes suplen a los lesionados Tobías Sainz-Trápaga, Alejandro Sánchez de la Rosa y Alberto Díaz.

Ocho de los doce titulares de Feijóo en el estadio Jean Bouin han disputado menos de diez torneos de las Series Mundiales y cinco de ellos han jugado tres como máximo, lo que da una idea de la inexperiencia del plantel español, que volverá a contar como reserva con el ala hispano-argentino Marcos Poggi.

Así, se antoja casi imposible que España evite caer al trofeo de consolación en un complicado grupo, el C, que se dirimirá en la primera jornada y en el que ha quedado encuadrada junto a Estados Unidos, que se disputa con Fiyi el título de las Series Mundiales en este último torneo del curso, Samoa y Canadá.