Paco Borao, presidente de la SD Correcaminos desde hace años, ha visto crecer el Medio Maratón València Trinidad Alfonso hasta consolidarlo entre las carreras Etiqueta Oro de la IAAF, y lograr dos récords del mundo, el femenino en 2017 y el masculino en 2018. Sin embargo, la suspensión cautelar este viernes de Abraham Kiptum, keniata que estableció el 28 de octubre la nueva plusmarca mundial, debido a anomalías en su pasaporte biológico, ha caído como un jarro de agua fría sobre la organización. La respuesta, con un comunicado ejemplar casi inmediato, alegato del deporte limpio y de los controles, que en Valencia fueron ratificados por la IAAF, no oculta la tristeza ante lo que pueda pasar con un récord del mundo que, como su protagonista, está ya bajo sospecha.

«Cuando den más información y la fecha sabremos si está suspendido dos, tres o más meses, porque después de Valencia corrió en Abu Dabi, Baréin y Granollers, y en todas los tests salieron negativos», explicaba Borao a SUPER. «Pero el pasaporte biológico es diferente. Su manager (Juan Pineda) le ha mandado que se busque un abogado y un médico que justifique los niveles anómalos que han encontrado y que le hacen estar suspendido provisionalmente».

Paco Borao, presidente además de la AIMS (Asociación de Maratones), insiste en la idea del comunicado sobre la validez de los procedimientos realizados en València. «El test antidopaje nuestro nos lo ratifican a las tres semanas de la prueba, y automáticamente el 6 de diciembre la IAAF nos ratifica el récord del mundo. Ahora bien, el pasaporte biológico requiere otro tipo de análisis, y ver cuándo se le ha detectado. Sabemos que la notificación le llegó a finales de marzo, pero no sabemos si es algo nuevo o la comprobación de algo anterior». De ahí el peligro que se cierne sobre el Medio Maratón Valencia y que ha hecho retirar incluso de su perfil de Twitter la referencia al récord del mundo masculino.

Aunque por delante va la presunción de inocencia, lo cierto es que ahora mismo nadie sabe lo que puede pasar con un registro (58:18) ya 'manchado'. «Dependiendo de filosofías, el récord es récord o no lo es. Si lo es, no hay discusión, aunque unos nos darán palmadas, y otros nos pondrán a parir. Pero récords del mundo dudosos en los análisis de la IAAF hay los que quieras pedir. Si es récord, hay que pagarlo; pero si no es récord, tocará recuperar el dinero de los premios y pedir daños y perjucios». Por ello, al no saber aún qué pasará, no descarta Borao incluso que Kiptum vuelva a València en el futuro: «Si da una explicación y es aceptada y se le declara inocente, por qué no».

«Mi sensación personal», confiesa Borao, «es que el récord se queda. Así lo pienso, pero no lo sé. Es algo que dirá la AIU (Unidad de Integridad de Atletismo), que tiene un plazo» para escuchar a las partes y decidir si hay una suspensión definitiva, desde qué fecha y hasta cuándo, y qué pasa con las marcas y en concreto con el récord del mundo de València. «El Maratón de Londres, como cualquier 'major', no se quiere mojar y por si acaso entrase en una suspensión definitiva, le retira la inscripción para la prueba del domingo. Pero Nike sigue manteniendo en su equipo a Kiptum. A los niveles de estos corredores y de las organizaciones de pruebas que queremos a estos corredores sabemos que estamos en el filo de la navaja. Pero nosotros seguimos pensando en superarnos. Detrás de Tadese vino Kiptum, y detrás de Kiptum vendrá otro. Eso es así. Es la ley de las organizaciones de carreras. El que tenga miedo a esto que no se apunte», concluye.