La etapa 4 de la Vuelta a España entre Cullera y El Puig recorrió de sur a norte la provincia de València, por el interior, y cientos de aficionados salieron a animar y ver la caravana y el pelotón de ciclistas y los coches de equipo.

La climatología dio una tregua y los aficionados pudieron disfrutar del ciclismo de élite por carreteras muy transitadas durante todo el año por los cicloturistas, como el port de L'Oronet, única dificultad montañosa de la etapa, a 40 km de la llegada a El Puig.