Dylan Groenewegen, del equipo Jumbo-Visma, cruzó primero la meta este miércoles, en un más que accidentado sprint final, de la primera etapa de la Vuelta ciclista a Polonia, disputada entre el estadio Slaski y Katowice sobre 195,8 kilómetros y que terminó con varios ciclistas por los suelos, entre ellos el propio corredor neerlandés, y el peor parado, el también neerlandés Fabio Jakobsen (Deceunick-Quick Step), que se estrelló contra las vallas.

Groenewegen se impuso en la meta de Katowice en un final en el que cerró el paso a Jakobsen, que trataba de encontrar hueco por la derecha y que se estrelló con violencia contras las vallas y contra un cámara de televisión, justo bajo el arco de meta, en una acción que a buen seguro traerá consecuencias.

Groenewegen cruzó la meta primero en plena caída contra el asfalto. Otro corredores también dieron con sus huesos en el suelo en el sprint. Tras Groenewegen acabaron el francés Marc Sarreau (Groupama-FDJ) y el esloveno Luka Mezgec (Mitchelton-Scott).

El equipo Deceunick-Quick Step ha informado de que sus médicos están atendiendo a su corredor neerlandés Fabio Jakobsen, el peor parado en el accidentado sprint.

Entre los afectados, hay un ciclista del Movistar Team, Edu Prades, que seguía la trayectoria justo a la valla, y que en su caída se estrella de espaldas contra una de las protecciones. El equipo telefónico confirmó que el ciclista "se encuentra bien" pero "deberá ser examinado tras su fuerte golpe en la parte inferior de la espalda". "Mucho ánimo a todos los accidentados", concluye el Movistar, en cuyas filas corre en Polonia el valenciano Sebastián Mora junto a su compañero de pista Albert Torres.