Después de nueve temporadas haciéndolo, para la 2019/2020 el Levante UD. Esta asistencia que se recorta venía siendo posible gracias a unos acuerdos de colaboración con los que, además de entradas para los partidos, el club ponía económicamente de su parte para facilitar los desplazamientos a cambio de inserciones publicitarias que la mayoría de las veces ni siquiera acababa gastando. Puestos en contexto, hay que reconocer que el cambio, justificado en motivos más que nada logísticos, llega en un momento dificilísimo para nosotros los plumillas. Es, desde luego, un duro revés para los que (tampoco todos, pero sí unos cuantos fieles) nos habíamos aprovechado de esta herramienta con la que desde el Ciutat nos asistían en la apuesta por la información granota. Escribiendo en primera persona, estos años han coincidido con los mejores de mi vida profesional y eso ha sido en buena parte gracias a las 'alas' que entre el Levante UD y mi periódico me han dado para contar in situ los históricos viajes por Europa o ser uno más de La Resistencia en los aviones y buses que nos trasladaban por los estadios de LaLiga. Aunque me habría encantado seguir igual, era consciente de que este día llegaría y que en una entidad que no para de crecer y en la que los pases tampoco van a seguir ya siendo gratis, al final esta no deja de ser la norma desde hace mucho tiempo en otros equipos. Así que vaya desde aquí mi gratitud y la de mis compañeros por lo que hemos vivido, el reconocimiento por mantener en vigor casi una década esta ventaja y el deseo de que la predisposición del club a ayudarnos de otra manera la consigamos materializar en algo.

Overbooking en los viajes

Por un aumento de los miembros de la expedición oficial (además de haber más directivos, empleados y técnicos, Paco López. No es ninguna mentira que el curso pasado miembros del departamento de comunicación oficial se tuvieron que quedar en tierra y viajar por carretera. Tampoco es algo que me hayan contado sino que puedo dar fe porque, como ocurrió en Bilbao, yo mismo les acerqué sus acreditaciones cuando llegaron a San Mamés con el reloj pegado a los talones. Después de tantos viajes y a tantos sitios es posible, y en esto hay que hacer autocrítica, que confundiésemos una deferencia que el Levante UD tenía con una obligación que en absoluto lo era. Como por desgracia ocurre tantas veces, ahora nos damos cuenta de cuánto perdemos.

Grande entre los pequeños

Respetando al máximo lo que puedan opinar otros afectados al respecto y asumiendo también las circunstancias particulares de cada uno, si en esta columna he decidido escribir sobre esto, que a fin de cuentas no deja de ser un tema interno, es porque al final las consecuencias van a recaer sobre ti que eres el que está leyendo, escuchando la radio o viendo la televisión. Me parece interesante darte contexto y que lo ocurrido no se acabe tergiversando ni reduciendo en falso a que el Levante UD ha expulsado de los viajes a los medios. Pese a que siempre hay cosas que mejorar, el granota es un club grande entre los pequeños de Primera y eso es algo que poner en valor y de lo que presumir con independencia de si lees, escuchas o ves lo que los periodistas te estamos contando.

Más opiniones de Rafa Marín.