El fair-play y la vuelta al ruedo en el Ciutat

Se viene un verano complicado en clave de mercado

El fair-play y la vuelta al ruedo en el Ciutat

El fair-play y la vuelta al ruedo en el Ciutat

Rafa Marín

Rafa Marín

El Levante lleva dos temporadas seguidas haciendo encaje de bolillos por culpa del desfase que arrastra en el fair-play y a estas alturas ya puede decirse abiertamente y sin ningún temor a equivocarse que la próxima será la tercera. Y es que en el caso muy probable de que el Real Madrid ejecute la cláusula de De Frutos antes del 30 de junio aún estará por ver si es posible aguantar sin el traspaso después de esa fecha de otro futbolista de los gordos. El club, en plena transformación de su modelo de negocio, viene de aguantar el tipo y además muy bien. Sin embargo, la pinta que tiene todo es que en el mercado va a haber más de lo mismo. Que Tebas no se quite de la boca la palabra «austeridad» refuerza todavía más esa sensación al tiempo que obliga a explorar en nuevas fórmulas más allá del partner para el estadio o el main-sponsor que falta en las camisetas.

Estas son las coordenadas en las que van a tener que moverse Manolo y David, a los que seguro que les gustaría contar con un poco más de margen para no estar obligados a la cuadratura del círculo como forma de vida. Después de haber hecho milagros con 3,8 millones fijos, casi lo que cobra Campaña, tendrán que seguir tirando de varita mágica junto a Quico tanto para las renovaciones como sobre todo para los descartes, posiblemente la peor parte por lo desfasadas que se han quedado algunas fichas. Se viene un verano complicado aunque eso no es sinónimo de ausente de movimientos. Los granotas están obligados a hacer muchos por el elevado número de futbolistas que quedan libres o casos como el de Toño, expuesto a un corte de contrato precisamente porque es inasumible contar con dos sueldos de primer espada en la misma posición.

El término medio

Encontrar el término medio entre la ecuación financiera y la inversión deportiva es siempre la piedra filosofal en un club que si se ha caracterizado en estas dos temporadas por algo ha sido por su don para explotar recursos a todos los niveles, ya sea con las reformas, con la configuración de la plantilla o con el aprovechamiento que Paco López ha hecho de los jugadores sin ninguna excepción. Mantener el crecimiento, además, es especialmente importante porque a la vuelta de la esquina está la reapertura de los estadios al público.

En el caso del Levante se trata de un momento aún más crucial porque supondrá el punto de inflexión de que todo el mundo tenga que pasar por caja. El motor en el mundo del fútbol es la ilusión y la que hay por pisar el remozado Ciutat es sin duda máxima. Sin embargo, ese entusiasmo habrá que aderezarlo con un proyecto que sea lo más ambicioso posible, capaz como mínimo de mantener resultados y de seguir acompañándolos con un estilo igual de atractivo.